Revolución blanca. Esto es lo que busca Florentino Pérez en los próximos mercados de fichajes. El presidente del Real Madrid quiere hacer un relevo generacional cuanto antes y volver a ser uno de los clubes favoritos para alzar la Champions League.
Ya se está trabajando en la llegada de Kylian Mbappé pero no solamente. Otra de las líneas a reforzar es la del centro del campo, muy tocada en los últimos meses. La nueva etapa de Zinedine Zidane está dejando grandes señalados y uno de ellos no deja indiferente a nadie.
Se trata del Balón de Oro 2019, Luka Modric, que va siendo ya habitual verlo en el banquillo. El joven Fede Valverde se ha hecho con su sitio y difícilmente lo sacarán de allí. A sus 34 años, no es descabellado en una salida millonaria del croata a un club de inferior categoría. Suena el Inter de Milán.
El fichaje que lo cambia todo
Si el 10 ya está tocado, el fichaje de Eduardo Camavinga lo dejaría sentenciado. El joven centrocampista de 17 años del Rennes pide a gritos el salto a un grande y podría encajar perfectamente en los esquemas de Zidane. El entrenador tiene mano con sus compatriotas y podría incluso sentar a Toni Kroos.
Eduardo Camavinga jugando contra el PSG / EFE
Casemiro y Fede Valverde son intocables por ahora. El relevo generacional ya ha empezado. Si se conforma el fichaje de la joven francesa sería toda una realidad. El alemán de 29 años estuvo en la cuerda floja al finalizar la pasada temporada, pero ha vuelto a ser uno de los titulares, aunque sigue sin convencer.
Camavinga solamente llegaría al Santiago Bernabéu si el Real Madrid abona los 100 millones de euros que piden los franceses. Tiene contrato hasta 2022 y está siendo una de la sorpresa del Rennes y de la Ligue 1. Tiene un desparpajo y una personalidad pocas veces vista.
Las otras amenazas
No se puede descartar en absoluto el fichaje de Paul Pogba, del Manchester United, que dejaría también muy tocados a la dupla de centrocampistas. El centrocampista galo quiere salir de Old Trafford y parece que sigue gustando mucho en Madrid. También suenan Eriksen y Donny van de Beek.
Paul Pogba, durante un partido con el Manchester United/ EFE
Otra de las amenazas internas para Kroos y Modric es la reaparición de Isco Alarcón. Va teniendo minutos como falso extremo, pero no se descarta que a la larga vuelva a la posición de interior que, en teoría, es su sitio natural. Se avecinan días duros para la dupla de la medular.