El Real Madrid no inició la temporada de la mejor manera posible, sin embargo, a día de hoy el conjunto blanco se ha reformado e incluso está jugando mejor que el Barcelona. Pese a todos, los líos en el club merengue no hacen otra cosa sino crecer.
Para Zidane ya es complicado confeccionar un once titular debido a las muchas piezas de calidad con las que cuenta en su equipo, entre los antiguos y los recién llegados.
Zidane apostó por Isco como titular/ EFE
En el último partido disputado por el Madrid, la titularidad se volvió a poner cara. Hubo cambios de posiciones y quedaron fuera de los escogidos algunos futbolistas que se preveía saldrían de inicio. La 'vacas sagradas' ya no lo son tanto y las nuevas pauestas del ténico francés vienen pisando fuerte
Todos quieren ser el elegido
Zidane colocó a Isco en posición de mediapunta y en banquillo se quedaron sus otras dos opciones de garantía para este puesto, como son Rodrygo y Bale. Se sabe que Bale no atraviesa por su mejor momento dentro del club blanco, tras las polémicas declaraciones durante su estancia con la selección galesa. El Bernabéu le abucheó en el último partido de Liga ante la Real Sociedad y su suplencia podría venir dada por dicho motivo.
Fede Valverde se consolida con el primer equipo/ EFE
Por su parte, Luka Modric, vigente Balón de Oro, se dedicó plenamente a calentar el banquillo. En su posición manda ahora Federico Valverde, que gracias a sus buenas actuaciones en la presente campaña, le está ganando la partida al croata, y de qué manera. Para Zidane, el uruguayo es indiscutible en el once titular y eso compromete además la participación de otros futbolistas como son Casemiro y Toni Kroos.
Incluso el propio Isco puede verse afectado por estas variaciones en los esquemas de Zidane, pese a que su rol ante el PSG dio mucho al equipo, tanto en posesión del esférico, como sin él.
La guerra por un puesto en el once inicial del Real Madrid está abierta. Muchos son los jugadores que se disputarán un mismo puesto y que lucharán para formar parte del club de los intocables de su entrenador. Bendito problema para Zidane.