Se complica la operación Paul Pogba en el Real Madrid. Con el mercado cerrado y el centrocampista francés en Old Trafford, las intenciones del club blanco residen en el mercado de invierno o, como mucho, el próximo verano. Dos ventanas para intentar convencer al club inglés de que se desprende de uno de sus mejores jugadores y mayores activos económicos.
Su fichaje fue uno de los rompecabezas del verano para Florentino Pérez. El United se niega a venderlo y el precio de salida es tan elevado que la economía del club madridista no podía hacer frente a un desembolso de ese calado. Con enero en el horizonte y el deseo intacto del futbolista de jugar bajo las órdenes de su ídolo, Zinedine Zidane, la operación tendrá que esperar, aunque no eternamente.
Tal y como informó The Sun, la intención y prioridad de la cúpula de los red devils es la de renovar al centrocampista galo. Una estrategia para blindar al actual campeón del mundo y, paralelamente, aumentar su valor de mercado. Mino Raiola, agente del jugador, ha mantenido distintas reuniones con el Manchester United en las que se ha sopesado la posibilidad de renovar al francés y ofrecerle una mejor salarial considerable. Una renovación por la que el agente percibiría un buen pellizco. Actualmente su vínculo con la entidad inglesa finaliza en 2021 y la intención es ampliar el contrato y aumentar su ficha para asegurar su continuidad en la Premier League.
Un sueño frustrado
De concretarse dicha renovación, que todavía no se ha formalizado en una propuesta, Zidane tendría muy difícil el fichaje de Pogba. El francés fue una de las exigencias del técnico galo a Florentino Pérez cuando regresó al Santiago Bernabéu pero la postura inflexible del United rompió con todas las negociaciones.
Paul Pogba tras el duelo ante el Wolverhampton / EFE
Todo hace pensar que Pogba aguantará hasta el mercado invernal, pero la postura del club es la misma: 200 millones de euros o se queda en Manchester. Una cifra estratosférica que Florentino no puede ni piensa asumir por un centrocampista, pese a que no tenga un recambio para un perfil defensivo.
¿La traición de Adidas?
Otro de los problemas inesperados ha sido la presencia de Adidas en las negociaciones. Pese a que la casa alemana viste al United y al Real Madrid, según informó el mismo rotativo inglés, Adidas prefiere que Pogba siga como red devil. De hecho, aseguran que fue uno de los mediadores entre agente, club y jugador para calmar los ánimos cuando Pogba pidió salir rumbo a la capital española.
Representantes de la firma alemana pidieron que al menos siguiera un año más en Old Trafford, una situación que alargaría su estancia hasta el verano de 2020. Una situación incómoda para Zidane quien ha visto como todas las promesas se han esfumado a excepción de Eden Hazard.