El vestuario del Real Madrid está que arde. Florentino Pérez se las prometía muy felices con el fichaje galáctico de Eden Hazard y las incorporaciones de futbolistas tan prometedores como Jovic, Mendy, Rodrygo Militao. Tras un año muy discreto, el presidente puso toda la carne en el asador para que los de Chamartín volvieran a lo más alto del fútbol europeo.

El optimismo y la alegría duraron hasta el primer partido de la pretemporada. El cuadro de Concha Espina cayó ante un Bayern de Múnich mucho más rodado (3-1) e inmediatamente volvieron los viejos fantasmas. La revolución parece no haber servido de nada, sobretodo porque Zidane alineó a los mismos de siempre. Solo Hazard se ganó un sitio en el once.

Eden Hazard en su primer encuentro con el Real Madrid / EFE

Eden Hazard en su primer encuentro con el Real Madrid / EFE

Tras el encuentro, el técnico francoargelino apareció visiblemente enfadado en la sala de prensa, quizás viendo que poco o nada ha cambiado. Y se cebó con el que probablemente menos lo merecía, Gareth Bale. El galés ni siquiera entró en la convocatoria y Zizou explicó que se debe a que le están buscando una salida.

"Es una vergüenza"

Preguntado por el momento de su venta, el entrenador espetó: "Si puede ser mañana, mejor". Zidane matizó que "no es nada personal. No tengo nada en contra de él, pero tomo decisiones. Llega un momento en el que hay que cambiar. Su salida es buena para todos. Es decisión del entrenador y también del jugador, que conoce la situación".

Zinedine Zidane en el duelo frente al Bayern de Múnich / EFE

Zinedine Zidane en el duelo frente al Bayern de Múnich / EFE

Palabras humillantes para un jugador como Bale. Y la respuesta no tardó en llegar. El agente del futbolista, Jonathan Barnett, expresó que "Zidane es una desgracia, no muestra respeto por un jugador que ha hecho tanto por el Real Madrid. Cuando Gareth se vaya será porque es lo que quiere él".

En declaraciones para The Sun, el representante admitió que, ahora sí, están buscando un nuevo destino para el jugador: "Estamos trabajando en ello". Las palabras públicas de Zidane no dejan otra. Por si había alguna duda, Bale no tiene sitio en el Real Madrid. Y este cruce de declaraciones no ha hecho más que aumentar la tensión y hacer insostenible la situación.