El escenario estaba definido a finales de mayo cuando el Real Madrid puso fin a una temporada para olvidar. En la clausura de la temporada en el Santiago Bernabéu, Keylor Navas jugó ante el Celta en lo que se entendió como su despedida del Real Madrid. Una situación que dos meses después ha cambiado radicalmente y que ahora permitiría al tico continuar en Concha Espina si asume el rol que Zidane tiene preparado para él: portero de Copa y poco más.
Este martes se hizo oficial la cesión de Luca Zidane, quien se postulaba como el segundo portero del conjunto blanco para esta temporada, al Racing de Santander tras el ascenso del equipo cántabro a la Liga 1|2|3. Un refuerzo que corresponde a distintos motivos. Zidane no puede prometerle los minutos que necesita a su edad, 21 años, y tampoco lo ve preparado para asumir un rol tan importante bajo tanta presión.
Operación salida
Pese a que la idea del técnico francés era la de mantener a Luca en plantilla, Florentino impuso su ley y zanjó el debate bajo palos desde el primer momento. Thibaut Courtois será el portero titular, y ahora solo falta saber si Navas aceptará su nuevo rol y si Lunin, el cuarto portero con el que contaba el técnico francés para la pretemporada, asume ser el tercer cancerbero o vuelve a salir cedido una temporada más.
Una foto de Luca Zidane durante el partido ante el Huesca / EFE
Luca jugará en Segunda División para coger rodaje y experiencia antes de volver al Santiago Bernbabéu. Una decisión difícil pero necesaria para el guardameta. La posible continuidad de Navas cambió radicalmente el escenario y ser el tercer portero --con lo que apenas jugaría en toda la temporada con el primer equipo-- no era una opción que convenciera a Luca.
Una cesión que espera recoger sus frutos la próxima temporada. Así pues, Luca se suma a la operación salida del Real Madrid tras las ventas o cesiones de Llorente, Kovacic, De Tomás, Reguilón, Odegaard y Theo.