James Rodríguez no seguirá en el Bayern de Munich la próxima temporada. Una decisión que ha tomado el propio jugador y que supone un contratiempo tremendo para Florentino Pérez. El delantero colombiano salió cedido rumbo a la Bundesliga el verano de 2017 y tras dos temporadas en el Allianz Arena, la falta de minutos y el poco protagonismo --motivos por los que salió del Santiago Bernabéu-- han decantado la balanza para buscar un nuevo reto.
El director general del club bávaro, Karl-Heinz Rummenigge, confirmó este martes la salida del colombiano por el que no ejercerán la opción de compra que se incluyó en la cesión del jugador por cifrada en 42 millones de euros. Por tanto, el cafetero deberá volver a la disciplina blanca hasta que el presidente blanco encuentre un nuevo destino para un jugador que no entra en los planes de Zinedine Zidane y tampoco tiene sitio en un vestuario que estará lleno de nuevas caras.
Rummenigge explicó a Sport Bild: "Estaba conmigo y me dijo en una conversación personal que le pide al club que no haga uso de la opción de compra y añadió: "En estas condiciones, no tiene sentido. Él quiere jugar, ser un jugador regular. Eso no está garantizado aquí. Personalmente lo lamento".
El problema que se viene
Con James decidido a no seguir en la Bundesliga y el Bayern respetando su decisión se abre un abanico de posibilidades para el Real Madrid en las que ninguna convence. La revolución de Florentino ya ha empezado. Este martes se anunció de forma oficial el fichaje de Luka Jovic por 60 millones de euros, mientras se espera la confirmación de Eden Hazard.
Una foto de James Rodríguez en el Bayern de Munich / Twitter
Una limpieza de vestuario que supondrá una inversión elevadísima por la que Florentino necesita ingresar capital para sufragar el coste de las nuevas incorporaciones. Y ese es el problema. Florentino tiene a James en venta, pero sin comprador, o al menos, no un comprador que esté dispuesto a abonar la cifra que se pactó con el Bayern.
El rompecabezas ahora se centra en encontrar un equipo que quiera al colombiano y por el que se pueda ingresar una cantidad mayor a los 35 millones de euros. Cristiano Ronaldo quiere al colombiano en la Juventus y el Napolés también ha preguntado por él, pero ninguno de los clubs italianos está por la labor de pagar semejante cantidad. Su periplo en Alemania ha devaluado al jugador y no hay ofertas que igualen o superen la que se fijó con el Bayern. El desprecio de Florentino al jugador parece, de momento, volvérsele en contra.