Zinedine Zidane ya piensa en la próxima temporada. Su profesionalidad le impide olvidar los seis partidos que quedan de temporada, pero si por él fuera y por el vestuario ya huberian echado la persiana abajo y colgado el cartel 'cerrado por vacaciones'.
Seis encuentros de puro trámite para certificar la tercera o segunda plaza antes de poner fin a una temporada nefasta, que cerrarán sin ningún título y que ha condenado a la plantilla a instalarse en una desgana constante cada domingo. La última prueba fue el Leganés que mereció mucho más ante un Real Madrid que volvió a salvar los muebles gracias a Karim Benzema. Es el protegido del técnico francés y, además, se lo ha ganado a pulso. Con goles, asistencias y juego al mando de un equipo sin alma ni garra.
Con junio en la mente y el nuevo proyecto del francés en la cabeza, Zidane ya ha dado una posible lista de fichajes para la próxima temporada. Una larga lista de posibles futuribles blancos a los que habrá que tantear y, de convencerles, negociar con sus respectivos clubs.
Recurriendo al ADN azulgrana
Y en esa lista de posibles fichajes se ha colado un excanterano azulgrana: Alejandro Grimaldo. El actual jugador del Benfica y compañero de Joao Félix --otro de los perseguidos por Barça y Real Madrid-- ha despertado el interés del club madridista.
Desde Inglaterra, el rotativo The Sun señala que Zinedine Zidane solo mantendrá la columna vertebral del equipo con cinco jugadores: Keylor, Carvajal, Sergio Ramos, Isco y Vinicius. El resto están en la puerta de salida y habrá que ver qué ocurre con ellos. Con Marcelo con medio pie fuera, pese a la intención inicial de Zidane de recuperar al lateral izquierdo, su nivel no es el de antaño y el galo ya tendría un recmabio de garantías que tampoco sería Sergio Reguilón.
Una foto de Alejandro Grimaldo celebrando un gol con el Benfica
Una foto de Alejandro Grimaldo celebrando un gol con el Benfica
El valenciano, formado en el Valencia y jugador del filial del Barça a partir de 2008, buscó mejor fortuna en Portugal en 2016 donde ha disputado 111 partidos con el Benfica y ha marcado diez goles y repartido 18 asistencias. Pese a su paso por distintos equipos, ha conseguido hacerse con el carril izquierdo del conjunto portugués que todavía sigue vivo en la Europa League.
Un refuerzo de menor embergadura económica, pero de difícil negociación dado su contrato con la entidad lusa hasta 2023 y su pasado azulgrana del que llegó a ser capitán del filial.