Cheik Doukouré se recupera en Barcelona de la lesión sufrida en su rodilla izquierda durante el partido ante el Real Madrid del pasado 24 de febrero. Operado el 6 de marzo de ligamento cruzado anterior, no olvida un encuentro marcado por la polémica que finalmente se llevó el conjunto blanco (1-2) después de que Benzema y Gareth Bale transformaran las dos penas máximas señaladas por el árbitro del partido, Iglesias Villanueva.
Tras ser operado en la capital catalana, el jugador marfileño ya piensa en su recuperación para volver a los terrenos de juego, pero no olvida los tres puntos que se escaparon del Ciutat de València por una fatídica patada al aire --que terminó en lesión-- y de una mala interpretación arbitral pese a la existencia del VAR.
El defensa concedió una entrevista al programa La Porteria de Betevé en la que repasó el encuentro ante los blancos y la polémica posterior que se dio. Confesó estar muy dolido por todo lo que se dijo sobre su persona tras el pitido final. "La mañana siguiente se inventaron cosas que yo nunca había dicho". Algo que se suma a la tristeza por perderse la Copa África y lo que resta de temporada.
Críticas al VAR
El Levante fue una víctima más de la mala interpretación arbitral y de la falta de un critreio unificado para la utilización del VAR, especialmente en partidos en los que el Real Madrid ha sido el rival. Defendió su actuación y destacó: "No soy un mentiroso, no hay penaltil las cámaras lo demuestran. No toqué al jugador, eso seguro" y añadió: "No toco balón, no toco al jugador y me lesiono. Mala suerte".
Una imagen de archivo de Casemiro con el Real Madrid / EFE
Una mala suerte de la que solo puede mirar hacia delante, pero de la que volvioó a reivindicar la herramienta del VAR: "No entiendo porque el arbitro no utilizó el VAR. Casemiro me llamó y también Butragueño, se lo agradezco. Él me dijo que lo toque, es su opinión" espetó, mientras mantuvo su postura.