José Mourinho no tardó en salir al paso de las informaciones conocidas este lunes sobre sus supuestos informes de los jugadores del Barça cuando el luso era entrenador del Chelsea. En concreto de un informe de Villas-Boas, quién formó parte del cuerpo técnico del club inglés durante cinco años, en el que se aprecia un detallado análisis del comportamiento y virtudes de los jugadores azulgranas del 2006.
Aquellos que se enfrentaron al Chelsea de Mou en Champions y que acabaron alzando la orejona en la final contra el Arsenal. Mourinho, no ajeno a la polémica generada, quiso salir al paso de dichos rumores: "Siento decepcionar a aquellos que creen que escribí los informes, pero no lo hice. Los informes no son míos, yo no los escribí", aseguró a SunSport. "El último informe que escribí lo tengo en casa. Estaba en Barcelona y fue en la temporada 1999/2000. Fui asistente y compartí con otros colegas la responsabilidad de analizar y preparar documentos sobre nuestros oponentes para el director técnico" sentenció el ahora comentarista televisivo de la Premier League.
Sin informes oficiales
Asimismo, el ex del Manchester United, rival ahora de los azulgranas en cuartos de la Champions League, ahondó en la teoría y explicó: "Desde que llegué al Benfica y hasta ahora mis análisis nunca se convirtieron en informes oficiales, sino en ideas clave que me ayudaban a preparar el trabajo de los entrenamientos y la planificación de partidos. Los informes oficiales siempre fueron realizados por analistas, asistentes y técnicos informáticos, pero nunca por mí".
Dureza con algunos jugadores
El tema, además, no ha quedado exento de polémica debido a la dureza y la crítica que vertió el portugués o quien fuera sobre algunos jugadores del club catalán. Destacan los nombres de Ronaldinho, Carles Puyol, Andrés Iniesta y Leo Messi, quién tenía solo 18 años en esa época.
De Ronaldinho se destacó: "Muy pobre en transiciones y en trabajo defensivo. Un tramposo constante. Va al suelo con mucha facilidad”, mientras que a Puyol, leyenda del barcelonismo, le dejaron retratado: "Agresivo, pero muy emocional. Se vuelve loco con el colegiado en las faltas que le hacen y las provocaciones que recibe. Defensa agresivo que utiliza mucho el cuerpo. Mal en el posicionamiento (sigue siempre al delantero hasta el centro del campo) y mal líder defensivo (intenta tirar la línea del fuera de juego en situaciones donde no es posible)".
Una foto de Ronaldinho y Leo Messi en el Barça / Twitter
Del argentino se resaltó su "calidad y velocidad, pero demasiado zurdo cerrado", así como su regate, pero llama la tención una anotación en la que se aconseja cometer faltas sobre el argentino. "Si la opción es cometerle una falta, es importante hacerlo fuera del área y tan pronto como sea posible, ya que se recuperó de una lesión recientemente", se muestra en el documento. Algo similar a los halagos que recibió Iniesta.
Mou se desentiende de la polémica, pero los informes ya son vox populi.