No gusta, pero es la realidad. En el presente del Real Madrid se ha instalado, desde su marcha, el fantasma de Cristiano Ronaldo. El portugués es jugador de la Juventus y está feliz en Turín, pero el mal juego de los blancos ha ahondado en la nostalgia que gran parte de la hinchada tiene respecto al luso.
En el club el discurso oficial está claro: Cristiano es pasado. Algo que Zidane, quien dirigió al crack portugués durante tres años, también quiso repetir en su presentación oficial como nuevo técnico blanco tras el despido de Solari. Fue cuestionado por ello y respondió tajante: "No es el tema. Ahora hay 11 partidos y luego veremos para el próximo año. Sabemos lo que es Cristiano, es historia y nadie lo va a cambiar. Ha sido uno de los mejores y ya está".
Respuesta del delantero
No estaba en los planes de Cristiano Ronaldo que la entrevista para DAZN se publicara casi el mismo día del retorno de Zidane a su exequipo, pero sus declaraciones apuntan a lo contrario.
El portugués se juega este martes el pase a cuartos de final de la Champions League contra el Atlético con un mal resultado (2-0) en tierras españolas. Unas tierras que, como destacó en la entrevista, no echa de menos. Volvió a hacer especial hincapié en la adaptación de su familia y la felicidad que reina en su casa: "Nos adaptamos bien. A mi familia le gusta Italia. Es una realidad, diferente, un país diferente, una lengua y una cultura diferentes pero me he adaptado bien".
España, pasado
Y añadió: "Siempre he vivido fuera de casa desde los 11 años por eso no tengo problemas adaptándome a otro país. Fui a Inglaterra con 18, a Madrid con 25 y a Turín con 33. No es difícil para mí adaptarme a un país o a una cultura diferente" y añadió señalando a la capital: "No echo de menos ni España ni Portugal. Las cosas son como son. Obviamente dejé muchos amigos, deje un gran club. Dejé un club que me dio mucho cariño, personas, amigos... Pero no echo de menos el país en sí, porque tengo lo mismo aquí. Estoy feliz".
Amigos y personas de los que tiene grandes recuerdos, pero de lo que no se arrepiente. El regreso de Zidane no cambia su punto de vista respecto a su salida del club. Además, sus problemas con el fisco español seguro que también habrán colaborado a no tener ganas de volver.