Santiago Solari está sentenciado, pero morirá con sus creencias por delante. Si el sábado mandó varios recados a pesos pesados del vestuario en la que podría haber sido su penúltima rueda de prensa como técnico del Real Madrid, el argentino tampoco se olvidó de Isco Alarcón.
Le recriminó públicamente su falta de condición física para jugar y este domingo hizo justicia a sus palabras: enèsima desconvocatoria del jugador malagueño para visitar al Valladolid en el José Zorrilla este domingo. Isco volveráa quedarse en la capital y tendrá que ver desde casa el encuentro de sus compañeros. Algo que también ocurrirá con otro componente de la plantilla.
Isco Alarcón sonríe durante un entrenamiento del Real Madrid / EFE
Isco Alarcón sonríe durante un entrenamiento del Real Madrid / EFE
El entrenador blanco convocó a 19 jugadores y hará un descarte final que mandará a la grada: Courtois, Keylor Navas y Luca, Vallejo, Varane, Nacho, Marcelo, Odriozola y Reguilón. Para la medular Kroos, Modric, Casemiro, Brahim, Asensio, Valverde, Ceballos y Seoane y Benzema y Cristo arriba.
Sin cuartel
El Valladolid apunta a que será el último partido del técnico argentino al mando del equipo. Una despedia casi asegurada que ni los sentimentalismos ni las necesidades deportivas dadas las bajas han dado la oportunidad al 22 blanco. Castigo sin piedad para el centrocampista.
Isco está sentenciado con el argentino y espera la llegada de un nuevo técnico para revertir la situación.