La baja de Cristiano Ronaldo está pesando más de lo que esperaban. Con el portugués se iban sus 50 dianas por temporada. Florentino Pérez decidió tirar de los jugadores que ya tenía para intentar tapar esta sensible salida. El resultado es evidente, nadie está haciendo de goleador en el Real Madrid.
Este miércoles se confirmó lo que ya se sabía desde inicio de temporada. El equipo de Julen Lopetegui tenía un problema goleador evidente. El buen final de año y principio de 2019 de Karim Benzema le convertían con el nuevo crack pero el francés no ha sabido aguantar al equipo él solo.
Muchas ocasiones, pocos goles
En el último clásico copero en el Santiago Bernabéu se volvió a ver un fallo evidente de cara a gol. Vinicius volvió a ser el mejor jugador del equipo y lideró todas las ofensivas de su equipo. El Real Madrid creó 14 ocasiones peligrosas de la cuales solo cuatro fueron a portería y se encontraron con Marc-André ter Stegen.
El brasileño de 18 años jugó su segundo clásico como titular. Le sacó las vergüenzas a Nelson Semedo una y otra vez. Disparó seis veces, dos más que todo el Barça. El resultado fue diferente. Los catalanes marcaron tres goles y los merengues cero.
Benzema en un mano a mano contra Ter Stegen / EFE
Benzema en un mano a mano contra Ter Stegen / EFE
Karim Benzema tampoco anduvo fino. Tuvo el gol de los blancos a final de la primera parte en un remate a bocajarro delante de Ter Stegen. Los nervios se apoderaron de él y su disparo fue tímido y dirigido al portero. En la segunda parte Luis Suárez no perdonó.
En el total de competiciones, la dupla blanca Vinicius y el francés llevan cuatro y 20 goles en partidos oficiales respectivamente. Una cifra que no sirve para mantener a un equipo como el Real Madrid. Más que los números son las sensaciones. Ya no existe esa casta y la famosa pegada es más propia de los culés que de los blancos.
Bale no está ni se le espera
Gareth Bale tuvo este miércoles –tras los incidentes en el Ciutat de Valencia– poco más de 20 minutos para demostrar que tiene un sitio en el once. Solo disparo una vez lejos del área del portero alemán y el balón salió más cerca del banderín de córner que del arco.
Bale entrando en el banquillo en el Real Madrid - Barça de Copa del Rey / EFE
Bale entrando en el banquillo en el Real Madrid - Barça de Copa del Rey / EFE
El galés era el recambio más parecido a CR7. Tiene remate y es un hombre con un golpeó letal. Pero el 11 va de decepción en decepción. Suplente con Santiago Solari lleva solo 13 goles en partidos oficiales. Lucas Vázquez le ha pasado por delante y parece que ya piensa en una salida este verano de Madrid.
Vinicius o el nuevo Cristiano
Desde Madrid insisten en comparar a Vinicius Junior con Cristiano Ronaldo y Leo Messi. A parte de Luis Suárez y Ousmane Dembelé fue el jugador ofensivo más destacado. Tras el partido solo sonaba su nombre. Jordi Alba contestó sorprendido ante esa comparativa con un “al final comparamos (Vinicius) con el mejor del mundo (Messi) y… hostia”.
Vinicius lamentando una ocasión delante de Marc-André Ter Stegen / EFE
Vinicius lamentando una ocasión delante de Marc-André Ter Stegen / EFE
Casemiro salió al paso de las críticas y defendió a sus compañeros delanteros. "Hace una semana estábamos hablando de que teníamos el mejor nueve, a Vinicius, a Bale. Benzema lo está haciendo muy bien. Está en su mejor año", insistió el centrocampista.
Es evidente que con esos registros goleadores, el Madrid tendrá que tirar de casta si quiere llegar a la final de Champions del Wanda Metropolitano. Cristiano cogía la responsabilidad sin ningún problema. En el primer partido clave fue Vinicius quien tiró del carro sin acierto. Alguien tendrá que dar un paso adelante o se prevé una temporada en blanco.