Santiago Solari se la juega. Sin medias tintas. Pasar a la final eliminando al eterno rival es una obligación para el técnico argentino si no quiere ver su liderazgo en el vestuario y el club tambalearse. La derrota ante el Girona ya le supuso un aviso de Florentino Pérez.
Se reunieron durante más de dos horas en un restaurante de la capital para abordar el estado de ánimo de un vestuario que volvió a dejar escapar tres puntos importantísimos para poner presión al Barça. Respondieron ante el Levante, pero el juego mostrado en el Ciutat de València tampoco invita al optimismo. El VAR salvó al Real Madrid sobre la bocina.
Con este escenario, todas las decisiones técnicas, desde la alineación hasta el planteamiento serán cuestionadas si fracasa. Sin margen para experimentos, Solari debe decidir su once de gala que vale una final y, simultáneamente, lidiar con el último incendio que Gareth Bale le ha originado en el vestuario.
¿Vacas sagradas o rendimiento?
Desde que el argentino llegó al banquillo del Bernabéu ha demostrado que no se casa con nadie. La suplencia de Bale ante el Levante no parecía apuntar a una dosificación pactada para el clásico y el cabreo del galés agudizó la crisis. Algo que podría quedar en el olvido si el extremo zurdo recuperara la titularidad este miércoles frente al Barça.
Una posibilidad real que Pipi Estrada, tertuliano de El Chiringuito de Jugones, que presenta y dirige Josep Predrerol, explicó en exclusiva en el programa.
Todo son suposiciones a la cara del jugador en el entrenamiento, pero Pipi Estrada aseguró en El Chiringuito que Solari podría reducir la tensión dándole la titularidad y devolverle la importancia que el galés. Pese a que sus preferencias están claras, con Vinicius y Lucas Vázquez por delante, Solari podría cambiar de planes para medirse al Barça y sacar partida de la velocidad de Bale.
Un duelo con Jordi Alba en combate constante de velocidad punta. Eso sí, si Bale está en el once, el mismo riesgo que corre el entrenador blanco, lo corre el jugador. Deberá cumplir a las expectativas depositadas en él y hasta ahora no se ha visto.