Nuevo rompecabezas, y de categoría visto el rival, para Santiago Solari este domingo. Los blancos visitarán el Benito Villamarín para cerrar la jornada del domingo con la obligación de ganar para acortar distancias en la clasificación, acabar con su crisis y evitar que los de Quique Setién, sextos en la clasificación, reduzcan a un punto la diferencia en la tabla.

Muchos objetivos a cumplir acompañados de muy malas sensaciones y una presión que, como años atrás, no está sentando bien a un equipo acostumbrado a estar en el foco. Tras la victoria frente al Getafe en la Copa del Rey, las aguas bravas vuelven con la Liga y el tropiezo en el Bernabéu frente a la Real Sociedad. 

Muchas dudas y un señalado

Sextos en la clasificación y con la obligación de remontar el vuelo, Solari tiene un problema de efectivos. Una plantilla de 25 jugadores, Solari deberá confeccionar un once con la ausencia de muchos de sus intocables. La portería volverá a ser de Keylor Navas tras la lesión de Courtois, pero dejando a un lado la polémica bajo palos, el centro del campo y la delantera están sin efectivos. Gareth Bale,  Asensio, Kroos, Llorente y Mariano son baja por lesión a las que se suma la de Vinicius, que por proceso gripal es duda para el domingo, y Lucas Vázquez, expulsado frente a la Real Sociedad. 

El técnico del Real Madrid, Santiago Solari, con el rostro desencajado ante la mirada de Isco / EFE

El técnico del Real Madrid, Santiago Solari, con el rostro desencajado ante la mirada de Isco / EFE

Nueve bajas que dejan temblando un once titular con muchas incógnitas. Un problema que para otro se antoja como una oportunidad. Isco Alarcón se postula como titular en distintas líneas. La ausencia de Kroos permitiría al malagueño acompañar a Modric en la medular, pero la banda izquierda, sin Asensio, ni Vinicius disponibles sería otro de los encajes donde podría entrar en acción el 22.

Enterrado

 Pero, ¿qué sucedería de quedar relegado de nuevo al banquillo? Entre Solari e Isco las diferencias son innegables. Algo ha ocurrido en su relación personal para que el malagueño haya dejado de entrar en cualquiera de los planes del técnico argentino. Disponibles solo quedan --que estén por debajo de sus galones-- Dani Ceballos, Brahim y Fede Valverde. 

Una foto de Isco Alarcón en el Bernabéu / EFE

Una foto de Isco Alarcón en el Bernabéu / EFE

Cualquiera de ellos por delante del centrocampista sería un varapalo que enterraría cualquier posibilidad de recuperar a un jugador que en  una temporada tan larga hará falta en el vestuario y, sobre todo, en el verde. Solari debe decidir pensando en la inmediatez y la necesidad y también en el futuro.