Florentino Pérez trabaja a destajo para cambiar el rumbo de una temporada que en enero, y pese a estar vivos en todas las competiciones, pinta cuesta arriba. La sensación de pesimismo y fracaso que se vive en el madridismo es patente, y solo parece que nuevas caras pueden aportar ese grado de compromiso y esfuerzo que, hoy por hoy, brilla por su ausencia en las 'vacas sagradas'.
Con Solari preocupado por el calendario que se avecina este enero, tampoco parece ser que los fichajes vayan a solucionarle una papeleta más engorrosa. Pocos llegarán en invierno, de momento solo Brahim Díaz, y pese a la proyección del malagueño, el equipo y la afición piden fichajes de efecto inmediato y no de planificación de futuro.
Refuerzos por contrastar
El todavía jugador del Manchester City aterrizará en el Bernabéu esta semana, pero la idea inicial es reforzar con un jugador cada línea, pero todavía se desconoce quienes serán los otros elegidos y de nuevo, la esperanza queda relegada al mercado de verano. Tan lejos e innecesario por ahora.
La irrupción de Mario Hermoso en el Espanyol es tan real como su regreso al conjunto de Chamartín. El ya internacional español será repescado por 7,5 millones de euros visto su rendimiento y la cláusula firmada por el central cuando abandonó el conjunto madridista. Hasta entonces, será el canterano Javi Sánchez, de 21 años, quien complete la zaga junto a
Una foto de Mario Hermoso durante un partido con el Espanyol / EFE
Arriba también habrá caras nuevas: Rodrygo Silva, por el que el Real Madrid pagó 45 millones de euros, llegará en verano para jugar su primera temporada en el Castilla, algo parecido a lo que sucedió con Vinicius Jr. También gusta Júnior Firpo. El dominicano ha llamado la atención de muchos equipos tras su buena temporada en el Betis, pero su cláusula de rescisión, de 50 millones de euros, obliga a la cautela.
La estrella y la 'bomba'
Y con esa agenda de fichajes para junio, falta una estrella que podría llegar en verano o nunca. La obsesión de Florentino es Neymar Jr., pero tampoco se olvida de Mbappé o Eden Hazard. Los tres están en una lista de futuribles, pero tan solo uno es realista: el belga quiere vestir de blanco la próxima temporada, pero de nuevo su incorporación sería tardía para maquillar esta temporada.
Asimismo, también está a la espera de una oportunidad de mercado. Christian Eriksen, pretendido por muchos, ha vuelto a rechazar la oferta de renovación del Tottenham, y el empresario madrileño ya ha movido hilos. De mantener su postura con los spurs, con quien tiene contrato hasta 2020, Daniel Levy, propietario del club, se vería obligado a ceder. En verano solo quedará un año por delante y el riesgo elevado de perder al jugador a ingreso nulo, preocupa en el conjunto londinense.
Una foto de archivo de Christian Eriksen / EFE
Si con los fichajes de Modric, en 2012, y Bale en 2014, Levy dificultó las negociaciones dado el margen de tiempo que tenía por contrato, pero con Eriksen se da todo lo contrario. Un escenario incierto que favorece a Florentino y al danés. Muchos fichajes y pocos para esta temporada. El presidente no tira la temporada a pique, pero su plan renove tiene vistas de futuro, no de presente.