El efecto Solari se va deshinchando visto las últimas actuaciones del Real Madrid. En un principio el técnico había resuelto el problema goleador de la era Lopetegui pero ha provocado otros problemas dentro del vestuario.
Este miércoles, los merengues hicieron el ridículo en la última jornada de la Champions League tras caer por 0-3 ante el CSKA. Los rusos ya superaron a los madrileños en la segunda jornada de la competición europea.
Siguen los problemas de Huesca
El pasado domingo el Real Madrid hizo un descafeinado partido ante el último clasificado de Primera División, el Huesca. El partido fue una mezcla de desorden y falta de intensidad. Los aragoneses estuvieron a punto de igualar el partido en numerosas ocasiones pero al final se mantuvo el 0-1 obra de Bale.
En el último partido frente al CSKA esa situación fue agravada por una falta total de compromiso. Santiago Solari presentó un once repleto de suplentes con Isco Alarcón y Marco Asensio –frutos del conflicto dentro del vestuario merengue— jugando de inicio.
Benzema disputando el balón ante el Huesca / EFE
Benzema disputando el balón ante el Huesca / EFE
Los tres goles que recibieron los blancos fueron un ejemplo de falta de ganas y de concentración. El Real Madrid llegaba al partido con los deberes hechos y eso se notó en la actitud de los jugadores.
Silbidos en el Bernabéu
El aficionado merengue no perdonó la poca profesionalidad de sus jugadores y el planteamiento del técnico argentino. Tal fue el nivel de humillación que los blancos se fueron al descanso (0-2) con una sonada pitada del Santiago Bernabéu.
La segunda parte del partido fue aún peor. Cayó el tercer gol de los azulgranas y los silbidos se focalizaron en los dos renegados con Solari, Marco Asensio e Isco Alarcón.
Posible salida de Solari
Santiago Solari llegó como relevo de Lopetegui. En los primeros partidos consiguió buenos resultados pero poco a poco ha ido provocando malestar en el vestuario. Sus enemigos principales son Isco y Asensio.
Una foto de Santiago Solari en el banquillo del Bernabéu / EFE
Una foto de Santiago Solari en el banquillo del Bernabéu / EFE
La paciencia de Florentino Pérez es poca. Si el ridículo de este miércoles se alarga ante el Rayo Vallecano y los merengues no se llevan el título del Mundial de Clubes, el argentino estaría sentenciado.
Con un mes de diciembre negro, Santiago Solari saldría en el mercado de invierno. La dirección blanca intentaría incorporar a algún entrenador de primer nivel como José Mourinho o Joachim Löw. El alemán, en declaraciones recientes, se ha dejado querer por el club blanco. Veremos cuanto dura la paciencia del presidente blanco.