Dani Ceballos es la revolución del Real Madrid. Desde que Zinedine Zidane anunció su despedida del banquillo blanco, el andaluz vio la puerta abierta a cumplir su sueño; triunfar en el Real Madrid. Un sueño que se vio intensificado cuando conoció que Julen Lopetegui, el seleccionador español que le llevó al Mundial de Rusia, iba a ocupar el banquillo del Bernabéu. Con el técnico vasco tuvo más oportunidades, pocas titularidades, pero se convirtió en un suplente de garantías.
Una situación que ha cambiado radicalmente con la llegada de Santiago Solari al mando del equipo. Ceballos quiere hacer carrera de blanco y tiene las cualidades y el carácter necesario para sobreponerse a las dificultades. Desde inicio de temporada, el madridismo ha criticado duramente el carácter afable y pasivo de jugadores consagrados en la élite mundial y en la entidad como Sergio Ramos, Kroos o Modric.
El cambio de entrenador le ha sentado de maravilla. Desde que el técnico argentino dirigió su primer entrenamiento, Ceballos decidió que esa era su oportunidad para dar un paso al frente. Preparó la pretemporada a conciencia y su carácter ganador le ha puesto por encima de algunos intocables la temporada pasada como Asensio e Isco. Creador de juego y llegador al área contraria, Ceballos ha mejorado en aspectos defensivos, esos que olvidan el mallorquín y el malagueño, vitales para dar un vuelco definitivo al mal inicio de curso.
Ceballos, carácter peligroso
Su carácter y ambición también le han llevado a esta situación. Ha sobrepasado en actitud a algunos de sus compañeros y muestra respeto pero no servilismo a los pesos pesados del vestuario. Un carácter que también ha llevado a la Roja y que Luis Enrique también valora. En el Croacia-España se las tuvo de varios colores con Luka Modric, compañero de equipo, y ambos intercambiaron opiniones y se reprocharon jugadas polémica.
Su carácter se ve como un punto fuerte en las oficinas del Madrid, la actitud que brilla por su ausencia en otros jugadores supuestamente intocables, pero puede significar el inicio de rencillas en el vestuario. La ascensión de los jóvenes gusta, pero algunas fuentes cercanas al vestuario aseguran que algunos pesos pesados del Madrid ya han evidenciado sus diferencias personales con el andaluz.
No gustan algunas de sus actitudes, tampoco sus declaraciones --fuera del discurso del vestuario-- y su egoísmo. De momento, el Madrid como institución valora muy positivamente su paso al frente, mientras que en el vestuario ya ha recibido varios toques de atención. A su favor juega la buena amistad que tiene con el capitán, Isco o Asensio. Por el momento.