Si Isco Alarcón ha vivido momentos complicados en el Real Madrid, el actual supera a todos los anteriores. El centrocampista malagueño sumó el pasado domingo su cuarta suplencia consecutiva. Si bien nunca se le ha considerado un titular indiscutible, el dato es demasiado llamativo para un jugador.
Isco recibió varios desplantes de Julen Lopetegui al principio de la temporada, pero la llegada de Solari no ha mejorado su situación. El ex del Málaga ha conseguido, temporada tras temporada, ubicarse como uno de los jugadores más destacados de la Liga, pero para el actual técnico del Real Madrid carece de los argumentos necesarios para ser titular en su equipo.
Decisión errónea de Isco
Sus buenas actuaciones llevaron a Isco a ser un jugador deseado tanto para el Real Madrid como para el Barça en el verano de 2013. Pese a que las preferencias del jugador parecían apuntar en dirección al Camp Nou, finalmente fue el conjunto blanco quien se hizo con sus servicios. Isco no las tuvo todas consigo e incluso tuvo acercamientos hacia el club catalán cuando su contrato estaba a punto de expirar, aunque Florentino Pérez y Zidane lo impidieron y acabó renovando.
Isco conduce un balón durante un partido del Real Madrid / EFE
Desde su llegada al Santiago Bernabéu, el centrocampista malagueño nunca ha conseguido ser una pieza indiscutible. Si bien tanto la afición como los técnicos son conscientes de sus buenas prestaciones, Isco siempre ha sido de los primeros sacrificados a la hora de hacer cambios. Ahora, con Solari en el banquillo, la situación no parece que vaya a mejorar.
No encaja
Al Real Madrid se le resistía el gol en el estreno del técnico argentino en el Santiago Bernabéu, el pasado 3 de noviembre contra el Valladolid. Vista la situación, Solari decidió retirar de campo a Casemiro y dar entrada a Isco, un futbolista más desequilibrante y rompedor. Sin embargo, la sensación que se llevó el exjugador blanco fue otro bien diferente.
Una foto de Isco durante un partido con el Real Madrid / EFE
Desde entonces, el papel de Isco ha sido testimonial. Contra el Celta el pasado domingo, Solari aportó por dejarlo nuevamente en el banquillo y cuando Casemiro se lesionó, prefirió sustituirlo por Dani Ceballos antes que por el medio malagueño. Para el entrenador argentino Isco no encaja en su estilo de juego, más vertical y donde las filigranas no tienen que ser una prioridad.
Otro factor que ha salido a la luz recientemente es que no se lleva demasiado bien con los pesos pesados del vestuario, por lo que carece del favor de la plantilla. Esto lo aseguró Eduardo Inda en una intervención en el programa El Chiringuito, donde también apuntó que a Isco se le "ha dado un toque de atención por estar pasado de peso".
Carácter desmedido
A Isco tampoco le juega un buen papel su carácter para intentar remediar la situación. Tanto en el Real Madrid como en la selección española, el jugador malagueño se ha mostrado poco responsable y disciplinado en lo personal, de ahí que nunca se haya consagrado. A su vez, cuando le falta creatividad en el juego se muestra poco solidario a la hora de jugar el balón y es muy habitual verle fallar posicionalmente.
Con el conjunto blanco, Isco ha conseguido numerosos títulos, pero nunca ha alcanzado el nivel de importancia dentro del equipo que se le podía suponer. Quién sabe si de haber tomado otra decisión en el pasado le hubiera llevado a vivir mejores momentos.