El Real Madrid atraviesa una crisis severa tanto de resultados como de identidad. Florentino Pérez a tomado la decisión más rápida y habitual en estos casos: destituir al entrenador. Julen Lopetegui entró con mal pie en el vestuario y su etapa en el banquillo blanco a durado menos de lo esperado. Sus planteamientos y gestión del vestuario han jugado en su contra, pues varios jugadores no han querido aceptarlos.
De ahí que desde la presidencia del Real Madrid haya tomado cartas en el asunto. El trabajo del entrenador ha dejado mucho que desear, pero la actitud mostrada por varios jugadores, y además de renombre, no han sentado nada bien.
Entrenador a la carta
Tras la conclusión del clásico del pasado domingo, varios jugadores madridistas atendieron a los medios. Uno de ellos fue Sergio Ramos, quien además de analizar la situación que atraviesa el equipo también dejó caer ciertos mensajes que no han agradado demasiado a los dirigentes.
Una foto de Suárez, Casemiro y Ramos en una disputa / EFE
El capitán del Real Madrid se unió al discurso de sus compañeros en el que afirmaba apoyar al entrenador, aunque el tono de sus declaraciones no sonaba demasiado convincente. “Las decisiones se toman desde arriba”, apuntó Sergio Ramos respecto a la posible destitución de Lopetegui. El central andaluz se desmarcaba, al igual que a sus compañeros, así de las consecuencias que pudieran derribar de la derrota en el clásico.
La llegada de Antonio Conte se daba por hecha en los medios y al ser preguntado por ello Sergio Ramos comentó que “el respeto se gana, no se impone”. Con estas palabras mandaba un mensaje tanto a Florentino Pérez como al técnico italiano, pues la plantilla responderá ante aquel entrenador que los respete y les muestre confianza. También apuntó que “a veces la gestión de un vestuario es más importante que los conocimientos tácticos”, dando a entender que para la plantilla es mejor contar con un técnico más dócil y manejable.
Culpables de peso
Las palabras del capitán dejaron entrever el malestar de la plantilla respecto a un cambio de entrenador que no concuerde con lo que están acostumbrados. Sin embargo, en la presidencia también se apunta a varios nombres de jugadores que no han mostrado interés en que las cosas mejoraran, importándoles bien poco la mala situación del equipo.
Los jugadores del Madrid se lamentan / EFE
Entre ellos se encuentras Toni Kroos y Luka Modric, que en los partidos que se han disputado hasta la fecha han mostrado una imagen impropia a su calidad. El centrocampista alemán siempre ha estado perdido y no ha conectado con sus compañeros. Por su parte, es difícil de entender que Modric, galardonado hace escasos meses con el premio The Best al mejor jugador de la temporada haya dejado de ser ese jugador tan determinante en la medular madridista.
Karim Benzema y Gareth Bale son otros de los señalados. Tras la marcha de Cristiano Ronaldo, se confiaba en que ambos asumieran galones tanto a nivel general como en la delantera. Pese a contar con la confianza del presidente y del entrenador, ninguno de ellos ha dad o el paso al frente que se les presuponía y han seguido mostrándose tan intrascendentes como en temporadas anteriores.
Llama la atención que todos ellos fueran hombres de confianza de Zinedine Zidane, con el que mantenían una buena relación y respondían con creces, sobre todo en los casos de Kroos y Modric, en el terreno de juego a las exigencias del técnico francés. Que varios jugadores se hayan dado de baja con Lopetegui en el banquillo es algo que no ha sentado bien en la dirección del Real Madrid, pues la consecución de algún título ya se ha puesto cuesta arriba.