Gareth Bale es un defraudador fiscal. Uno más. Hasta ahora el galés era el único crack del Real Madrid que se había librado de la redada fiscal ejecutada en el mundo del fútbol. Pero al final Hacienda ha terminado por cazar al escurridizo delantero. Y a Gareth Bale le toca rendir cuentas ante el Fisco.
La Agencia Tributaria ha multado a Gareth Bale con 337.000 euros por defraudar impuestos con sus derechos de imagen por medio de una sociedad inglesa. El fraude se corresponde con el ejercicio de 2013, año en que el jugador fichó por el Madrid proveniente del Tottenham.
Gareth Bale debió tributar en España sus ingresos comerciales durante 2013. Pero no lo hizo. Por esta razón Hacienda le imputa un fraude fiscal de 200.000 euros, unidos a una sanción de 100.000 euros y unos intereses de 37.000 euros. De modo que en total el acta tributaria que le ha sido notificada al jugador asciende a los 337.000 euros.
Gareth Bale no ha explotado en el Real Madrid / EFE
Gareth Bale se toca la frente durante un partido / EFE
El expediente fiscal de Gareth Bale, que ya ha sido recurrido por los abogados del jugador, pone el foco en los ingresos publicitarios que percibió por medio de su sociedad Primesure Limited, domiciliada en Londres, y que el galés tenía constituida desde 2007.
Pese a que Gareth Bale no era residente fiscal en España en el ejercicio de 2013, Hacienda considera que el futbolista debió tributar en nuestro país los derechos de imagen que generó vistiendo la camiseta del Real Madrid, por los que se le exige un 19% de impuestos.
Ahora bien, a diferencia de lo ocurrido con otros futbolistas blancos, Hacienda no ha estimado en este caso indicios de delito fiscal.
Cuando no son casos aislados
El fraude de Garteh Bale se suma al de una larga lista de futbolistas del Madrid que ya han sido sancionado por Hacienda. El caso más importante, por la cuantía de la sanción, fue el de Cristiano Ronaldo. El portugués tuvo que abonar 18,8 millones al fisco y admitió una pena de dos años de cárcel.
Otro caso reciente es el de Luka Modric. El croata ha reconocido su culpabilidad en dos delitos fiscales. Por un lado defraudó 870.728 euros al cobrar sus derechos de imagen a través de una sociedad instrumental luxemburguesa. Además, y al igual que Gareth Bale, no tributó íntegramente sus derechos de imagen en España durante el ejercicio en el que aterrizó en Madrid. En total, el jugador FIFA The Best tuvo que desembolsar 2,6 millones para saldar cuentas.
Una foto de archivo de Cristiano Ronaldo y Luka Modric en el Real Madrid / EFE
Una foto de archivo de Cristiano Ronaldo y Luka Modric con la camiseta madridista / EFE
Marcelo es otro de los madridistas que recientemente ha tenido que regularizar su situación con Hacienda. El carrilero brasileño ha acordado pagar 753.000 euros y ha aceptado una pena de cuatro meses de prisión por cometer delito fiscal.
La nómina de merengues defraudadores continúa con Karim Benzema, quien tuvo que pagar medio millón de euros al Fisco, y Sergio Ramos, quien solventó sus problemas con una multa de 100.000 euros.
A esta lista habría que sumar futbolistas que vistieron de blanco como James Rodríguez, sancionado con cuatro millones de euros, aunque absuelto de la acusación de fraude; Carvalho, penalizado con un millón de euros por delitos fiscales; Di María, quien pagó dos millones y admitió un año de cárcel; y Ozil, con 2,8 millones de multa.