El Real Madrid regresó este verano al trabajo con cambios muy relevantes en su plantilla y cuerpo técnico. La ausencia tanto de Cristiano Ronaldo como de Zinedine Zidane, en el terreno de juego y en el banquillo, respectivamente, obligaron a reconfigurar el equilibrio de fuerzas del plantel blanco.

Mucho se ha hablado –y se seguirá haciendo- de la marcha del portugués a Italia y por tanto de su ausencia en el equipo madridista. Y no hablamos únicamente de los goles que aportaba el luso y sus acciones espectaculares, sino también de sus galones en la caseta y en el terreno de juego. Por no mencionar la relevancia otorgada a sus palabras cada vez que se pronunciaba sobre un tema relevante ante la prensa.



Hay por tanto un vacío relevante que llenar que habrá de ser cubierto, en la medida de lo posible, por los jugadores actualmente en el plantel blanco. En ello están metidos nombres como Sergio Ramos (nuevo primer encargado de los penaltis), Karim Benzema (primer goleador, por ahora, de la plantilla) o Gareth Bale, Luka Modric e Isco (los tres en posición de figurar como primera estrella del equipo).

El plan de Florentino

Florentino Pérez es consciente de esta reconfiguración de roles. A pesar de lo mal que acabó su relación con Cristiano, el presidente madridista sabe bien la relevancia deportiva y mediática que asumía el jugador portugués. Por ello cuando el luso confirmó su marcha, Pérez trazó un plan.



El presidente merengue tiene a Marco Asensio como uno de sus preferidos en el plantel blanco. Por su calidad, su juventud y su proyección, en los despachos del Bernabéu se piensa que el balear está llamado a ser el relevo de Cristiano. Tanto a nivel futbolístico como desde el punto de vista del marketing y la imagen del club.

El no de Asensio

Por estos motivos Florentino decidió tener un gesto de gran simbolismo hacia Asensio. Según ha revelado Julio Maldonado Maldini en la Cope, el Real Madrid ofreció al balear el número 7 que, desde su segundo año en el equipo, Cristiano llevó a sus espaldas.



Sin embargo la sorpresa llegó cuando el joven delantero rechazó ese ofrecimiento. A pesar de que el propio portugués no se ha cansado de elogiar el talento de Asensio y su enorme potencial, éste declinó la invitación del club. Manteniéndose así con el dorsal número 20 que desde hace años luce tanto en el club como en la selección.

Marco Asensio con la camiseta roja del Real Madrid | EFE

El nuevo dueño del 7

Lo curioso de esta historia es dónde ha acabado finalmente el ya mítico dorsal madridista. Sobre la campana de cierre de mercado aterrizó en Concha Espina Mariano Díaz Mejía. El canterano madridista regresa a la que fue su casa reforzado por su buena temporada en el Olympique de Lyon, pero todavía con muchísima que demostrar. 



Esa categoría de jugador todavía de segunda fila en todo un Real Madrid no evitó que al recién llegado se le ofreciese la camiseta con el dorsal abandonado por Cristiano y luego rechazado por Asensio. Un movimiento que muchos han interpretado como un feo más de Florentino a su ex estrella. 

Así, el protagonismo en este año del 7 madridista a buen seguro será bien diferente al de años anteriores. De ocupar portadas casi cada fin de semana pasará a tener un rol a priori bastante secundario. Un papel que no era el previsto por los mandamases madridistas, pero que ha llegado tras el no rotundo del joven Marco Asensio.