La historia, con distintos protagonistas, se repite. Hansi Flick recuerda cada día más a Terry Venables. Tras un primer año maravilloso, las prestaciones del Barça cayeron en picado. La pasada temporada, el equipo azulgrana ganó la Liga, la Copa del Rey y la Supercopa de España, con una propuesta futbolística muy aplaudida. Era un Barça con clase y chispa. El Barça actual, en cambio, es mucho más plano. El cambio actual se parece al de hace 40 años, con el técnico inglés.
El Barça de Venables ganó la Liga 1984-85 con gran autoridad. Su presión alta asfixiaba a los rivales, pero no supo reinventarse. Flick, curiosamente, también mantiene la defensa adelantada. Hace un año fue la mejor solución. Ahora, la defensa barcelonista es un coladero.
De la Fuente
Flick está preocupado porque el Barça actual no tiene tanto nervio como el de la pasada temporada. Sorprendentemente, en el curso actual apenas da carrete a Marc Casadó, un futbolista tan dinámico como intenso. Hace un año, su rendimiento fue espectacular y fue convocado por Luis de la Fuente para la selección española.
Marc Casadó, presionado por Yuri Berchiche en el Barça-Athletic Club
Casadó ha pasado de titular indiscutible a suplente eterno. En Stamford Bridge, en un partido en el que el Chelsea fue muy superior al Barça, no disputó ni un minuto. Y eso que Frenkie de Jong tuvo otro mal día.
Números discretos
En la actual temporada, los números de Casadó son muy discretos. El centrocampista, más suplente que titular, ha participado en 13 partidos en los que no ha marcado ni un gol y ha dado una asistencia.
Luis de la Fuente abraza a Lamine Yamal
Flick entiende que Casadó no está al mismo nivel que la pasada temporada. Tampoco quiere arriesgar con Marc Bernal, quien acaba de superar una grave lesión de rodilla. Frenkie de Jong es intocable para él y prefiere a Éric García a Casadó, una decisión controvertida desde el punto de vista deportivo.
