Los jugadores del Barça celebran el autogol de Jorge Sáenz EFE
El Barça sufre horrores en Leganés y llega justo de gasolina a la lucha final por el triplete
Un autogol de Jorge Sáenz permite al equipo azulgrana ganar en Butarque y reforzar su liderato en la Liga
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El Barça va al límite. Sumando puntos y descontando jornadas en la Liga. El equipo de Hansi Flick, con poco fútbol y más sufrimiento, ganó un partido feo en Butarque. Un autogol de Jorge Sáenz salvó al grupo barcelonista en Leganés.
El calendario es una pesadilla para el Barça. No hay tregua en un fin de curso muy exigente. Tres días después de golear al Borussia Dortmund, el equipo azulgrana sumó tres puntos más en Leganés, a la espera del Alavés-Real Madrid de este domingo. Hoy, la distancia entre ambos es de siete puntos.
Partido desagradable
Las Ligas se ganan con exhibiciones y, también, en partidos trabados, duros, desagradables. En Leganés, el Barça nunca estuvo cómodo, ni tan siquiera cuando su rival le retó a un duelo abierto. Lamine estuvo apagado y Pedri no tuvo la clarividencia habitual. Los mejores fueron Szczesny, Koundé e Iñigo Martínez. Significativo.
Lewandowski celebra el primer gol del Barça EFE
Hansi Flick agitó muy poco el equipo que goleó al Borussia Dortmund. Araujo y Éric García sustituyeron a Cubarsí y Frenkie de Jong contra el Leganés. Gavi, una vez más, fue suplente. Igual que Ferran en un partido con el guion escrito de antemano. Sin sorpresas tácticas. Monopolizaba el Barça el balón y replicaba el equipo pepinero, que pudo marcar en un remate de Altimira abortado por Szczesny.
Intensidad local
El Leganés, con cuatro normas básicas, resistía ante un Barça incómodo. Cerraba bien los espacios el equipo de Borja Jiménez, más intenso, que minimizaba los errores en su campo y opta por rápidas transiciones y un fútbol muy directo.
Lamine Yamal encara a Altimira EFE
El Barça estaba espeso. Sin ideas. Si acaso Koundé buscaba soluciones por la derecha. A Lamine le faltaba chispa y Lewandowski se peleaba con los centrales rivales. Tampoco Raphinha estaba muy productivo en un equipo que aguardaba alguna genialidad de Pedri. El Leganés, mientras, se encomendaba a Raba, un dolor de muelas durante muchos minutos. Cuando corría, sufría horrores el líder, que lamentó también la lesión de Balde.
Entra Frenkie de Jong
El partido pintaba mal y Flick rescató a Frenkie de Jong, en detrimento de Araujo, incapaz de romper líneas y dar pases de calidad. El gol llegó tras un robo de Gerard Martín y un centro de Raphinha que Jorge Sáenz desvió dentro de la portería de Dmitrovic.
Koundé cabece el balón en Leganés EFE
El gol calmó la ansiedad del Barça y el Leganés acusó el golpe. Fermín pudo sentenciar el partido con una acción individual de mucha calidad, pero erró el remate, para desesperación de un equipo con más deseo que acierto. Le faltaba chispa al grupo azulgrana, cada vez más exhausto, y sufridor hasta el final ante un rival que le había derrotado en Montjuïc.
