El Barça espera noticias de la Liga. El club que preside Joan Laporta asume que no hará grandes fichajes en el mercado de verano, pero el máximo dirigente y su director de fútbol, Deco, preparan cambios importantes, en función de los traspasos que cierren en julio y agosto. Otro club con urgencias deportivas es el Atlético de Madrid. Simeone ya ha ideado la gran revolución, pero la entidad rojiblanca tampoco está para tirar cohetes. Y entre ambos clubes hay muchos intereses compartidos.
Barça y Atlético de Madrid deberán ser muy selectivos con las nuevas incorporaciones. Ambos clubes intentarán fichar a jugadores que acaban contrato o que llegarían cedidos de sus equipos. Es el caso, por ejemplo de Marcos Alonso.
Marcos Alonso, al Atlético
El barcelonista Marcos Alonso acaba contrato el 30 de junio y ya tiene un acuerdo verbal con el Atlético de Madrid. En ambos clubes también jugó su padre, ya fallecido, en los años 80. Esta temporada, el lateral ha tenido muy poco protagonismo en el Barça por culpa de sus dolencias lumbares, de las que fue operado.
El Atlético también espera noticias de Iñigo Martínez. El defensa vasco tiene contrato con el Barça hasta junio de 2025, pero el club azulgrana solo pudo inscribirlo durante un año en la Liga. El Barcelona podría concederle la carta de libertad a cambio de ahorrarse su ficha, que asciende a nueve millones de euros.
El futuro de Joao Félix
El Barça, mientras, presiona al Atlético para que prorrogue un año más la cesión de Joao Félix. Simeone no quiere saber nada del delantero portugués y Enrique Cerezo, presidente rojiblanco, desesaría traspasarlo por 70 millones de euros. El problema es que Félix se ha devaluado y solo contempla su cesión al equipo azulgrana.
El futuro de Joao Félix podría resolverse con un trueque. El Atlético, por ejemplo, estaría encantado de poder fichar a Ferran Torres y Raphinha. Ambos jugadores, de momento, han expresado su deseo de iniciar la pretemporada con el Barça de Hansi Flick. Su precio, además, es caro. El club azulgrana solo vendería al atacante brasileño por 80 millones de euros. O más.
El delantero de Xavi
Barça y Atlético de Madrid, por otra parte, tienen muy buenos informes de Dovbyk, la gran sensación del Girona. Xavi Hernández quería al delantero ucraniano para sustituir a Robert Lewandowski, pero el despido del técnico de Terrassa ha frenado su posibl fichaje por el futbolista. El Atlético, mientras, aprieta por Dovbyk, pero el Girona no quiere negociar su traspaso y exige los 40 millones de euros de su cláusula de rescisión.
Dani Olmo, delantero del Red Bull Leipzig, es otro jugador que gusta mucho a Hansi Flick y a Simeone. Su precio podría rondar los 60 millones de euros y Barça y Atlético podrían pelearse por un atacante polivalente y con mucha clase que sueña con regresar a España. En la Roja, Olmo comparte vivencias con Mikel Merino, centrocampista de la Real Sociedad que también está en la agenda de los dos equipos en un mercado que no será fácil para culés y colchoneros.