Joan Laporta, presidente del Barça, presume de la Masia. Del fútbol formativo. De la cantera. Hoy, el club no puede competir con el Real Madrid ni los grandes equipos europeos en el mercado de fichajes. Su economía está muy tocada, con una deuda de 1.200 millones de euros y la masa salarial excedida. Y, mirando al Johan Cruyff, el Barça tiene jóvenes con muchos talentos. Entre ellos, un portero.
"El portero del futuro del Barça no es Iñaki Peña, es Diego Kochen", aseguran en el Johan Cruyff. De momento, el guardameta estadounidense juega en el filial. Es un portero de 18 años, de 1,90 metros, con un buen dominio del balón con la pierna derecha y grandes reflejos.
Iñaki Peña, el presente
Kochen ya ha entrado en la dinámica del primer equipo en los últimos meses. De momento, trabaja en la sombra. Con Ter Stegen, sabe que deberá esperar. El portero alemán es intocable. Xavi dijo de él que es "el mejor guardameta del mundo para el Barça" y Flick mantendrá los galones que tiene Ter Stegen.
La alternativa a Ter Stegen es Iñaki Peña. Al menos, a corto plazo. El portero alicantino tuvo continuidad esta temporada cuando el alemán fue operado de sus problemas lumbares. Alternó buenas actuaciones con otras muy discretas. No lo tuvo fácil. Su ascenso coincidió con el peor momento del equipo.
Kochen, el futuro
Esta temporada, Iñaki Peña ha jugado 17 partidos con el Barça en los que encajó 32 goles. Y solo en tres encuentros mantuvo su portería a cero. Su mejor actuación fue en Montjuïc, el día que el equipo azulgrana se impuso al Atlético de Madrid (1-0).
Iñaki Peña seguirá, como mínimo, un año más en el Barça. Mientras, Kochen seguirá entrenándose con el primer equipo. Es el portero del futuro y tiene contrato con el club hasta junio de 2028.