Hansi Flick tiene una alternativa a Nico Williams que ya sabe lo que es intimidar al Real Madrid

Hansi Flick proyecta el nuevo Barça. El nuevo técnico ya se ha reunido con Joan Laporta, presidente, y Deco, director de fútbol, para abordar la renovación de la actual plantilla. Habrá salidas importantes, pero también fichajes ilusionantes. Eso, al menos, espera Flick.

En Alemania, el fichaje de Flick por el Barça ha sido muy bien recibido. Por ejemplo, por Lothar Matthaus, exjugador del Bayern y del Inter de Milán. "Para Flick supone un gran desafío a pesar de las dificultades económicas con las que se encontrará en Barcelona", aseguró el exfutbolista de la selección alemana.

Los más jóvenes

Flick es un entrenador muy exigente. Quiere que el Barça sea un equipo mucho más físico, intenso y vertical que el Barça de Xavi. Antes de decidir el nombre de los futbolisas a los que deberá sacrificar, ya ha notificado que cuenta con los jóvenes de la cantera. Sobre todo, con Lamine Yamal, Pau Cubarsí y Héctor Fort.

En Alemania aseguran que Flick es un entrenador valiente que busca el equilibrio ideal entre los más jóvenes y los veteranos. Y en Alemania hay dos futbolistas que le gustan mucho. "Florian Wirtz, Jamal Musiala... Hay muchos jugadores que le gustaría tener con él en el Barcelona, pero probablemente no serán viables económicamente", aseguró Matthaus.

Flick conce perfectamente a Musiala, una de las grandes pesadillas del Real Madrid en la última eliminatoria de la Champions. El mediapunta del Bayern es un futbolista con mucha proyeccón. Tiene clase y desparpajo. Y una mentalidad muy ofensiva. Si finalmente no llega Nico Williams, del Athletic, el Barça podría abordar su fichaje. El gran problema es que su valor de mercado, según Transfermarkt, es de 110 millones de euros.

Jamal Musiala celebra un gol con el Bayern / FCBayern

Las cifras de Musiala

Esta temporada, Musiala, de 21 años, ha disputado 38 partidos con el Bayern en los que ha marcado 12 goles y ha dado ocho asistencias. Es una de las grandes joyas del equipo alemán y, también, un sueño, posiblemente imposible, de Flick para mejorar al Barça.