Plácida victoria en Japón y hasta la temporada que viene. Con tres millones en el bolsillo y rindiendo pleitesía a Andrés Iniesta, uno de los mejores futbolistas del mejor Barça de la historia. En Tokyo, el equipo de Xavi Hernández se impuso al Vissel Kobe en un partido en el que los jóvenes tuvieron mucho protagonismo y se reivindicó Pablo Torre, un centrocampista con mucho talento.
El Barça, una vez más, participó en la última fiesta de Iniesta, quien disputó 761 partidos con la camiseta azulgrana antes de iniciar su aventura japonesa, hace ya cinco años.
Estreno de Julián Araujo
Xavi aprovechó el partido contra el Vissel Kobe para dar la primera oportunidad a Julián Araujo, el lateral mexicano que no pudo inscribir el Barça por cerrar el acuerdo con ocho minutos de retraso en el pasado mercado de invierno.
En el equipo titular también estaban Pau Prim (centrocampista) y Daniel Rodríguez (delantero), dos juveniles de 2006 que ya podrán explicar que un día jugaron con sus grandes ídolos. Con el Barça. Y, sobre todo, el equipo se encomendó a Pablo Torre, un futbolista con mucho talento.
Iniesta, en un lance del partido entre el Vissel Kobe y el Barça
Pablo Torre
El Barça ya pudo marcar a los dos minutos con un remate lejano que repelió el poste. Tuvo el control del partido y marcó el primer gol a los 16 minutos tras una asistencia de Pablo Torre que culminó Kessié.
Otro actor secundario, Éric García, marcó el segundo gol del Barça, tras un saque de esquina botado por Pablo Torre, en un arranque muy plácido para los azugranas.
Réplica local
El Kobe estuvo muy cohibido durante la primera media hora y solo reaccionó con dos remates lejanos de Iniesta y Samper. El Barça, con el freno de mano puesto, ralentizó el ritmo del partido y solo Dani Rodríguez intentó una jugada individual a cinco minutos del descanso.
Lewandowski, ante el Vissel Kobe
Tras el descanso han entrado Koundé, Raphinha, Ferrran Torres, Gavi, Héctor Fort y Marc Guiu, que pudo marcar tras un saque de esquina que cabeceó impecablemente. Después Arnau Tenas entró por un inspiradísimo Iñaki Peña, pero la mejor ovación fue para Iniesta, sustituido a 10 minutos del final.