Dani Alves y el fichaje que rompe los esquemas a Xavi

Por mucho que pasen los años, el FC Barcelona no encuentra la fórmula que le permita encontrar a un lateral derecho de presente y futuro. Se ha ido renovando progresivamente en otras posiciones, con el auge de canteranos como Pedri, Gavi y Alejandro Balde, además de la llegada de cracks consagrados como Robert Lewandowski. Sin embargo, sigue sin encontrar a un lateral diestro de garantías.

Se trata de una posición maldita en el Barça desde que se marchó Dani Alves. Tanto, que desde que Héctor Bellerín hizo las maletas durante el pasado mercado invernal, no hay ningún futbolista que se desempeñe en dicha posición de forma natural. Ni Sergi Roberto, ni Koundé ni Araujo son laterales diestros, por muchas veces que actúen de parches a la hora de tapar el agujero.

Nadie ha llegado para quedarse

Infinidad de nombres han pasado por el lateral derecho del Barça en los últimos años, y ninguno ha funcionado. Douglas Pereira, Martín Montoya, Nélson Semedo, Sergi Roberto, Sergiño Dest, el retorno de Dani Alves, el mencionado Héctor Bellerín… Desde la llegada de Xavi al banquillo hay varios nombres que suenan, pero ninguno convence del todo a la hora de apostar por él en el mercado de fichajes.

Foyth, Dalot, Pavard, Meunier, Frimpong, Arnau, Cancelo, Mazraoui… Se hablaba también de Julián Araujo, aunque se trata de un futbolista sin experiencia alguna en Europa, y que pese a entrenarse con el primer equipo difícilmente será una opción real para conseguir un puesto a corto plazo en el primer equipo.

El abrazo entre Dani Alves y Xavi, en un entrenamiento del Barça / FCB

El abrazo entre Dani Alves y Xavi, en un entrenamiento del Barça / FCB

Tampoco es una prioridad absoluta

Mientras tanto, el FC Barcelona aspira a reforzar otras posiciones en busca de un nuevo delantero centro --que supla los goles de Lewandowski--, un extremo regateador, un centrocampista creativo o un central de rendimiento inmediato.

La búsqueda de un lateral derecho también está activada, aunque no es una prioridad absoluta debido a los buenos resultados defensivos del equipo esta temporada 2022-23. Y los recursos económicos del FC Barcelona son limitados, de cara al verano, para cumplir con todos los deberes pendientes.