El Barça no aprovechó el regalo del Girona y el desenlace de la Liga no parece inminente. El Rayo Vallecano, mucho más intenso, castigó al grupo de Xavi Hernández, un líder al que le sobran puntos pero le falta fútbol. Todavía es un equipo con muchas carencias y limitaciones, que se proclamará campeón por inercia y por los despistes de un Madrid que solo se motiva en las grandes citas. En Vallecas, Ter Stegen encajó dos goles en otra noche negra. La del año pasado le costó el cargo a Ronald Koeman.
Xavi fue, de entrada, atrevido en Vallecas. En un partido que esperaba intenso, el técnico del Barça prescindió de Éric García y situó a Frenkie de Jong como mediocentro y a Gavi y Pedri como interiores. En ataque, Ferran Torres le ganó la partida, una vez más, a Ansu Fati y acompañó a Raphinha y un Lewandowski en horas bajas. En el campo, sin embargo, su Barça fue un equipo vulgar y sufrió su tercera derrota en la Liga.
El gol de Álvaro
El Rayo arrancó con más ritmo, a todo trapo, ante un Barça que quería madurar el partido. El equipo de Iraola ya avisó a los 17 minutos tras un error de Pedri que no supo resolver Camello. Dos minutos después, la insistencia local encontró el premio del gol de Álvaro, que superó a Ter Stegen con un remate cruzado.
El gol premió el desparpajo rayista y penalizó a un Barça sin chispa. Reaccionó pronto el lídercon un remate de Lewandowski que desbarató Dimitrievski, un portero que suele crecerse en sus duelos contra los barcelonistas.
Gol anulado a Lewandowski
El Barça tenía la pelota, pero no encontraba espacios para maniobrar. Poco, muy poco hizo el Barça en ataque, atascado en el buen orden defensivo del Rayo, un equipo que vive plácidamente en la zona media de la clasificación. Poco antes del descanso marcó Lewandowski, pero el gol fue invalidado por fuera de juego. Antes, el árbitro ignoró un claro penalti a Marcos Alonso.
El primer acto terminó sin más novedades y el segundo comenzó sin grandes cambios. Con un Rayo más motivado y un Barça al que no le iba la vida. A los 53 minutos, Fran García marcó el segundo tanto local tras otro despiste barcelonista.
La bestia negra del Barça
Perdía el Barça, pero el equipo seguía sin tensionarse, como si el de Vallecas fuera un partido de trámite ante un Rayo que se ha convertido en su bestia negra en los últimos años, incapaz de derrotarle en la temporada actual y en la pasada. El gol de Lewandowski a siete minutos del final reactivó al equipo de Xavi, pero el Rayo resistió hasta el final
El Barça, igual que hace un año, encoge después de Semana Santa, como si los cursos se acabaran antes de tiempo, aunque en el actual vive de las rentas de las primeras evaluciones y todo indicará que habrá final feliz. Pero la nota final estará muy lejos del excelente, aunque puede subirla en los próximos dos partidos en el Camp Nou, ante el Betis y Osasuna.