El Getafe jugó sus armas, y el FC Barcelona intentó jugar las suyas. Al final, el resultado contentó mucho más a los locales que a los visitantes. Los de Xavi Hernández acabaron desquiciados durante buena parte del partido de este domingo, no sólo por las oportunidades de gol erradas --ya son demasiados minutos sin marcar-- sino por el hecho de que el Getafe, a base de una defensa digna de la época de Bordalás, se llevó una recompensa inmerecida.
Damián Suárez, experto en desquiciar
También acabaron los culés hartos de algunas situaciones concretas, como las provocaciones y entradas al límite de un futbolista que ya tiene un largo historial en acciones de este tipo: Damián Suárez. El carrilero del Getafe, toda una institución ya en el club, empezó a hacerse célebre cuando jugaba en el Córdoba y Neymar Jr le bailaba sin cesar. La intensidad de sus marcajes sacaba de quicio al brasileño, y cuando el uruguayo fichó por el Getafe continuó esa relación de amor-odio entre ambos. Así, hasta que el brasileño se marchó a París.
Damián Suárez ha protagonizado rifirrafes sobre el césped con prácticamente todos los cracks de los equipos contrarios. Y este domingo, en el Coliseum Alfonso Pérez, Robert Lewandowski y Gavi fueron sus víctimas. Antes de la media parte, el delantero polaco del FC Barcelona recibió un cabezazo del charrúa que no fue sancionado por el árbitro.
Las protestas de Lewandowski --otra vez seco ante la portería rival-- no sirvieron de nada. Gavi, por su parte, recibió una dura entrada de Damián en la primera parte que tampoco fue castigada, mientras que en el segundo tiempo sufrió un pisotón del jugador del Getafe que, esta vez sí, le sirvió para ver la cartulina amarilla. Fue a la hora de partido, en el minuto 57.
Un empate que cabrea al FC Barcelona
En condiciones normales, Damián Suárez podría haber acabado fácilmente expulsado. El caso es que aguantó hasta el final, y los árbitros permitieron nuevamente la mal llamada intensidad de un jugador que se las tuvo con otros jugadores del FC Barcelona. Lo cierto es que, al igual que el resto de sus compañeros, logró su objetivo.
El Getafe arañó un punto del partido contra el FC Barcelona, que le servirá para afianzar aún más su posición y alejarse en la medida de lo posible de los puestos de descenso. El empate, aunque no es mal, sabe a poco a un Barça que desea asegurarse el título de Liga por la vía rápida. Y últimamente, está sufriendo una sequía preocupante...