El Barça aplicará la ‘fórmula Griezmann’ a un delantero que ha decepcionado

El FC Barcelona priorizará la venta de los futbolistas de la cantera o que llegaron con la carta de libertad en verano porque son futbolistas amortizados que dejarán beneficios. En cambio, el club que preside Joan Laporta lo tiene más complicado para vender a jugadores que costaron mucho dinero y cuyo rendimiento no es satisfactorio. El caso más claro fue el de Antoine Griezmann. Ahora, con cifras más modestas, sucede lo mismo con Ferran Torres.

Ferran Torres fichó por el Barça en enero de 2022 y se comprometió con el club hasta el 30 de junio de 2027. En el mejor de los casos todavía quedarían por amortizar 44 millones de euros, una cifra superior a su actual valor de mercado, según Transfermarkt: 30 millones de euros.

El fichaje de Ferran

El Barça pagó 55 millones de euros fijos al Manchester City y contempló otros 10 millones más en variables. Si el club entiende que su fichaje se amortiza en seis años, el coste es de 10,8 millones de euros anuales. En tal caso, quedarían 44 millones por amortizar.

Xavi Hernández da instrucciones a Ferran Torres en el clásico de Copa en el Bernabéu / EFE

Xavi Hernández da instrucciones a Ferran Torres en el clásico de Copa en el Bernabéu / EFE

En cambio, si el Barça entiende que el fichaje de Ferran se debe amortizar en cinco años, quedarían todavía 52 millones de euros por amortizar. Esta es la opción más probable porque el club negoció un traspaso creciente.

Esta temporada, Ferran Torres ha participado ya en 40 partidos con el Barça, en los que ha marcado seis goles y ha dado dos asistencias. Suplente habitual, en las últimas semanas ha perdido su batalla con Ansu Fati.

El caso Griezmann

El Barça sabe que varios clubes quieren a Ferran Torres. Entre ellos, el Atlético de Madrid. Sin embargo, el presidente Joan Laporta no quiere perder dinero con un jugador de 23 años que puede jugar en cualquier posición de la delantera: ya sea como extremo o como delantero centro

En el caso de Griezmann, el Barça pagó un total de 135 millones de euros por el delantero francés, a quien vendió esta temporada por apenas 20 millones.