El fichaje de Vitor Roque por el FC Barcelona empieza a complicarse cada vez más. Al precio desorbitado que pide el Atlético Paranaense, ahora hay que tomar en cuenta la presión que están ejerciendo los grandes clubes de la Premier League. Desde la junta de Joan Laporta --principal interesado en la incorporación-- se mantienen pacientes con respecto a la operación, teniendo en cuenta las dificultades financiera que vive la entidad azulgrana.
En la inglesa empiezan a sonar con fuerza el Arsenal y Chelsea como pretendientes del delantero brasileño. Los dos equipos quieren invertir en la joven perla para la siguiente temporada, por lo que empiezan a ser un problema en los planes del Barça. En este sentido, el Paranaense quiere sacar el mayor beneficio posible por Vito Roque, lo que seguramente se traducirá en tratar de ejercer presión sobre el futbolista para que acepte alguna de las tentadoras ofertas de la Premier, o incluso del PSG, que también suena como posible destino.
Según ha informado Fabrizio Romano, el club brasileño ha tasado al delantero en 45 millones de euros. Una cifra que se aleja, al menos a día de hoy, de las posibilidades del Barça. Desde el club azulgrana esperan convencer para que dicho valor se reduzca de forma considerable, teniendo en cuenta que la irrupción del jugador en cuestión ha sido en poco tiempo. La expectativa es que el fichaje no supere los 40 millones.
El Barça juega con ventaja
Por ahora, la principal ventaja del FC Barcelona es que Vitor Roque quiere vestir la camiseta azulgrana. El brasileño ha sido claro en su deseo de recalar en el equipo que dirige Xavi Hernández, por lo que deberá ser un elemento de presión en las negociaciones entre el Barça y Atlético Paranaense. Desde la dirigencia culé esperan a que el atacante de 18 años sea paciente, con el objetivo de superar los problemas del Fair Play financiero.
Ese factor es el que puede ser determinante en los planes del Barça. Hay que recordar que la dirección deportiva ya jugó con esa estrategia en el mercado de verano del año pasado con las incorporaciones de Jules Koundé, Raphinha y Marcos Alonso, por citar algunos casos. Aunque no siempre tuvo resultados favorables, recordando que César Azpilicueta prefirió definir su futuro y no esperar a la entidad catalana.