El Barça-Girona solo puede definirse como soporífero. El encuentro disputado en el Camp Nou --y que terminó con empate a cero-- ofreció pocas emociones para los 78.425 espectadores que asistieron. Fue tan poco emocionante el partido que una de las imágenes más destacables la protagonizo una niña que se quedó dormida en pleno primer tiempo. Una clara representación de lo que fue el compromiso.
Un partido para dormir
El comienzo del encuentro no correspondió a lo que se vio posteriormente. Los primeros minutos tuvo una gran intensidad por parte de los dos equipos. Los dirigidos por Xavi tuvieron buenas oportunidades para picar adelante en el marcador, pero el acierto no estuvo de su lado. Ese pequeño tramo fue un espejismo, debido a que el resto del partido --excepto los últimos minutos-- fue poco emocionante para la afición del FC Barcelona.
En ese grupo de aficionados se encontraba una pequeña niña. Las cámaras captaron a la joven aficionada del Barça dormida en un tramo de la primera mitad. Dicha imagen, procedente de Movistar Fútbol, empezó a circular por las redes sociales, en donde los usuarios vinculados a la entidad azulgrana expresaron que se sintieron identificados con esa hincha por las escasas situaciones de gol que se generaron en el Camp Nou.
Un empate y gracias
Al Barça le costó demasiado superar el bloque del Girona. No hubo velocidad ni ritmo al tratar de armar las jugadas en ataque. También se echó en falta regate interior y exterior. El equipo de Xavi Hernández no asumió demasiados riesgos, pensando que en alguna acción podrían destrabar el encuentro, especialmente a partir de un error forzado por la presión en campo rival.
Pero dicho gol nunca llegó. El Girona se plantó bien en el campo e incluso pudo irse del partido con una victoria si Valentín Castellanos no habría desaprovechado la clarísima ocasión de gol que tuvo en la segunda mitad. El Barça también contó oportunidades, pero la mayoría fueron insistencia y no por juego colectivo. Una imagen que no ha gustado al barcelonismo, sobre todo tras el duro golpe recibido la semana pasada en la Copa del Rey contra el Real Madrid.