El Real Madrid puso en evidencia todas las carencias del FC Barcelona. Las lesiones de Christensen, Frenkie de Jong, Pedri y Dembelé constataron las enormes diferencias que hay entre titulares y suplentes en el equipo de Xavi Hernández. La plantilla es competitiva, al menos en España, pero corta y las salidas de Gerard Piqué, Héctor Bellerín y Memphis Depay debilitaron a un equipo con tantas ganas como urgencias, con mucho compromiso y menos talento. Y Jordi Cruyff, director deportivo, reconoció que el club debe sacar conclusiones tras la derrota de Copa del Rey con vistas a la próxima temporada.
Jordi Cruyff asumió que el Real Madrid tiene un plantilla más amplia y fue muy superior al Barça. Pidió que se aprendiera la lección, pero no en la actual temporada, sino en la planificación de la próxima. El problema es que las necesidades deportivas chocan con la dura realidad económica.
La masa salarial
El Barça, con una deuda de 1.200 millones de euros, ya sabe que deberá rebajar su masa salarial en 200 millones de euros. De los 648 millones actuales debe pasar a los 450 millones de la próxima temporada. Y en las oficinas del Camp Nou y de la Ciutat Esportiva asumen que deberán dar bajas no deseadas.
Mateu Alemany, director de fútbol, trabaja sin hacer mucho ruido. No lo tiene fácil para fichar a futbolistas, sobre todo por las dificultades para encajar sus fichas, pero mucho más complicado es vender a futbolistas que se han devaluado en el Barça y que tiene salarios muy elevados.
Dest, Umtiti y Lenglet
El Barça, por ejemplo, deberá negociar de nuevo una salida para futbolistas que no entran en los planes de Xavi como Sergiño Dest, Samuel Umtiti y Clement Lenglet. Menos problemas tendrá con Abde y Nico, a quienes, en principio, el club repescará en verano y podrían hacer la pretemporada con el primer equipo. Si el Barça recibe alguna propuesta interesante, serán traspasados.
Joan Laporta, presidente del Barça, necesita una o más ventas para cuadrar los números. El pasado verano quisieron vender a Frenkie de Jong al Manchester United, que ofrecía 80 millones de euros, pero el centrocampista neerlandés no quiso irse del Camp Nou.
Este verano, el Barça podría ser igual o más duro con Ansu Fati y Ferran Torres. Quien tiene mejor cartel es el delantero africano, pero su valor de mercado ha pasado de 80 a 35 millones de euros en apenas dos años.
Busquets y Alba
El Barça también negocia, a la baja, la renovación de Sergio Busquets y podría intentar rebajar la ficha de Jordi Alba o concederle la carta de libertad. Tampoco se descarta la salida de Kessié, un futbolista que llegó gratis hace un año y que tiene varios pretendientes. El que más le seduce es el Inter de Milán.
Buscará el Barça fórmulas ingeniosas para reforzar la plantilla. Xavi quiere un equipo más pulcro. Con más clase. Y su prioridad, como informó Culemanía, pasa por fichar a un mediocentro. Bernardo Silva era su gran objetivo en 2022. Ahora sueña con rescatar a Leo Messi, el futbolista que más ilusiona a la afición. Xavi también quiere un central zurdo, un lateral diestro, un mediocentro y un goleador, pero la caja no da para tanto. Y el Barça tiene un problema. Sabe que debe mejorar para recuperar el prestigio perdido en Europa, pero la caja del club está vacía. Con muchas tensiones.