Cinco goles como cinco soles. Esas fueron las dianas que Erling Haaland endosó este martes al RB Leipzig, en la vuelta de octavos de final de la UEFA Champions League 2022-23. El delantero noruego transformó además los tantos en poco menos de una hora, convirtiéndose en el futbolista que más goles ha marcado en un solo partido de la competición junto a Leo Messi, que lo había logrado ante el Bayer Leverkusen.
Ambos lo han hecho bajo el mando del mismo entrenador, Pep Guardiola. Aunque, en otras circunstancias, Haaland podría haberlo hecho con la camiseta del Barça. El hoy delantero del Manchester City era el primero de la lista para reforzar el frente de ataque del Barça, hace apenas un año. Un fichaje que finalmente no se dio, aunque no fue porque Laporta y los suyos no quisieran.
Xavi, Cruyff y Laporta intentaron convencerle
El conjunto culé intentó de todas las maneras convencer al futbolista de que su llegada al Barça sería un bombazo deportivo y económico, y de que el proyecto que arrancaba de la mano de Xavi Hernández en el banquillo iba a tomar forma a velocidad de crucero. Sin ir más lejos, el de Terrassa llegó a viajar junto a Jordi Cruyff para reunirse con el futbolista noruego.
Fue a principios de marzo de 2022, cuando entrenador y director deportivo se desplazaron hasta Múnich para mantener un encuentro cara a cara con Haaland. Allí le hablaron sobre el proyecto deportivo, clave para el fichaje, aunque finalmente el tema económico acabó sentenciando al Barça.
Laporta se había visto en varias ocasiones con su entonces representante, Mino Raiola, fallecido en abril de 2022. Se reunieron en Barcelona, pero también en Mónaco. La idea del presidente era convencer por un lado a su agente y que Xavi y Cruyff hicieran el resto con el futbolista, en el plano deportivo. No hubo manera, porque las altas comisiones que solicitaban desde el bando de los Haaland hicieron imposible la operación.
Imposible económicamente para el Barça
El padre del delantero noruego, Alf-Inge Haaland, pedía una prima de fichaje de más de 30 millones de euros, mientras que Raiola también quería un bonus idéntico. Además, había que hacer frente al traspaso para sacarle del Borussia Dortmund, que ascendía a casi 60 millones de euros. Junto a su estratosférico salario, el montante total de la operación superaba los 300 kilos, una cifra imposible de asumir para el Barça.
El Manchester City sí tenía esa capacidad económica para fichar a Haaland, y también para convencerle con un proyecto ganador bajo el mando de Pep Guardiola. El pasado del padre del futbolista en el City también contribuyó, en el plano emocional, a que se consumase la operación. Haaland fichó por el Manchester City y, desde entonces, no ha dejado de marcar goles en todas las competiciones. Tiene contrato vigente como skyblue hasta junio de 2023, aunque se dijo en su momento que podría salir a partir de la tercera temporada, en 2025. Para entonces, quién sabe si podría darse una nueva intentona por parte del Barça...