Raphinha ha vuelto a agitar las redes. El brasileño vacunó al Valencia CF en el Camp Nou, aprovechándose de su nueva especialidad: las vaselinas de cabeza. Si bien ese tipo de jugadas corresponde más a un atacante de otras características, el futbolista azulgrana ha logrado ampliar sus registros a partir de esa precisión para mediar los centros.
La acción contra el equipo valenciano fue a partir de un centro bastante preciso de Sergio Busquets en la zona central. El balón fue en dirección hacia el corazón del área y Raphinha tuvo que calcular con mucho criterio, debido a que le llegaba por la espalda. Su desmarque le permitió ganar el tiempo necesario para conectar el esférico con la cabeza y así superar a Giorgi Mamardashvili.
Raphinha repite la fórmula
Hay que recordar que el brasileño ya había conseguido marcar de esta forma durante el agónico triunfo del Barça en casa del CA Osasuna. En aquel compromiso, el equipo de Xavi Hernández estaba jugando con un menos por la polémica expulsión de Robert Lewandowski, por lo que había muchas limitaciones para armar las jugadas en campo rival. Pero Raphinha pudo anotar el gol de los tres puntos, tras aprovechar un espectacular pase aéreo de Frenkie de Jong, que pudo ver a la perfección el desmarque de su compañero hacia el área. El cabezazo del extremo no pudo ser más preciso, porque que fue con la trayectoria necesaria para superar por completo la resistencia de Aitor Fernández.
Tampoco hay que pasar por alto que el sudamericano también había hecho gala de ese tipo de anotaciones en un amistoso con Brasil ante Túnez. Resulta curioso que Raphinha esté teniendo una mayor precisión como cabeceador y no tanto con su hábil zurda. Con ese perfil ha logrado repartir una buena cantidad de asistencias, pero le ha faltado más paciencia para marcar desde fuera del área.