El Barça apeló al orgullo para evitar otro fiasco en Europa. Marcus Rashford, un delantero que hace tres años flirteo con el equipo azulgrana, tuvo contra las cuerdas al líder de la Liga, muy trabado en la construcción y sufridor en defensa. Empató el Barcelona y gracias, con Raphinha salvando los muebles cuando la hinchada barcelonista temía por otra derrota cruel. Dentro de una semana, en Old Trafford, el grupo de Xavi Hernández necesitará una actuación memorable para seguir vivo en la Europa League. También precisará la mejor versión de Lewandowski, una estrella que parece apagarse a medida que avanza la temporada.
Xavi cuenta con un equipo base al que introduce algún cambio a cuentagotas. Las rotaciones, presumiblemente, llegarán el domingo contra el Cádiz, pero ante el Manchester United cambió a Balde por Alba, más experto y profundo en ataque, y a Christensen por Marcos Alonso, más físico y contundente que el danés.
Raphinha pugna con Casemiro : EFE
Raphinha pugna con Casemiro / EFE
Araujo y Koundé
El técnico del Barça también sorprendió con la ubicación de Araujo, que comenzó como lateral, pendiente de Sancho, y Koundé como central. En el United, Ten Hag fue atrevido y su equipo intentó sorprender al Barça con una propuesta ofensiva, propia de un equipo grande, porque ambos equipos no hace tantos años eran los mejores de Europa y disputaron dos finales de la Champions. Ambas, con victoria barcelonista.
El partido, muy táctico, tuvo mucho ritmo, con fases de fútbol bien elaborado y otras con un juego mucho más directo. En el Barça, Lewandowski se estrelló con De Gea, y Webhorst y Rashford toparon con Ter Stegen, una vez más resolutivo y providencial en situaciones de alto riesgo.
Pedri, tendido en el suelo, tras lesionarse ante el Manchester United / EFE
Pedri, tendido en el suelo, tras lesionarse ante el Manchester United : EFE
La lesión de Pedri
La primera parte tuvo muchas alternativas, con intercambio continuo de golpes, y muchos problemas para el Barça en la salida del balón. También fue motivo de preocupación la lesión de Pedri, sustituido por Sergi Roberto, un futbolista multiusos en horas bajas.
Con más carácter y determinación arrancó el Barça el segundo acto y Marcos Alonso cabeceó un medido córner botado por Raphinha. El gol tuvo una dedicatoria muy especial para su padre, exjugador azulgrana que falleció tras una larga enfermedad.
Gavi celebra con euforia desatada el gol de Marcos Alonso, dedicado su gol a su padre, que falleció la semana pasada / EFE
Marcos Alonso dedica su gol asu padre, que falleció la semana pasada : EFE
La reacción del United
El Barça golpeó primero pero el United replicó inmediatamente, con un gol de Rashford que sorprendió a Ter Stegen y un autogol de Koundé tras otra acción prodigiosa de la gran estrella inglesa.
El United se creció en la adversidad y llegó con mucha comodida ante Ter Stegen. En España, la defensa del Barça es solvente, pero en Europa palidece en los partidos de más empaque. A Xavi no le quedó más remedio que agitar su equipo con las incorporaciones de Christensen, Balde y Ansu Fati por Marcos Alonso, Alba y Kessié, rescatando el 4-3-3, pero la solución llegó en un centro cerrado de Raphinha que no tocó Lewandowski pero despistó a De Gea.
El Barça, inferior futbolísticamente, apeló al carácter para replicar al Manchester United, un equipo que también está en construcción y cada vez más cerca de recuperar la gloria perdida. Como el Barcelona, todavía con muchos déficits pero sobrado de ambición y compromiso.