El Barça acelera en la Liga. El equipo de Xavi Hernández ha puesto la directa para ganar un título que eleve la autoestima de un club muy tocado económicamente. En el Benito Villamarín, el grupo azulgrana combinó inteligencia y ambición para derribar a un Betis que fue de más a menos, atrevido al principio y resignado al final. Con 50 puntos de 57 posibles, el Barcelona cierra una primera vuelta muy meritoria. El Real Madrid, a la espera del Valencia, ya está a ocho puntos.
El día después de que la Liga inscribiera a Gavi, el Barça completó un partido muy serio. Contundente en defensa, inteligente en el centro del campo y punzante en ataque, el líder ganó al Betis con buen fútbol y sufrimiento final por el autogol de Koundé. Antes, Raphinha y Lewandowski marcaron para los barcelonistas, mucho más solventes con Sergio Busquets y Frenkie de Jong en el doble pivote.
Montaña rusa
Xavi conoce perfectamente el Barça, un club que es una montaña rusa de emociones, exagerado en casi todo y, actualmente, necesitado de alegrías después de tres años de muchas turbulencias y fiascos.
La visita al campo del Betis era otra reválida de nivel y Xavi fue con todo. No especuló ni dosificó a nadie. Alineó al mejor equipo posible, con Raphinha en sustitución de Dembelé, lesionado, y con el centro del campo más poblado, con Gavi cediendo la banda izquierda a Balde. Y, obviamente, con Lewandoski como gran referente ofensivo. El grupo de Pellegrini es de lo mejorcito de la Liga y sus futbolistas tienen calidad suficiente para hacerlo un roto a cualquiera.
Las ocasiones de Pedri
El Barça, como había avisado Xavi, se encontraba cómodo con la pelota y el Betis disfrutaba cuando corría, en las contras. Tenía más la pelota el equipo azulgrana, pero su rival siempre buscó el momento oportuno para golpearle, con William Carvalho y Fekir muy activos. Pedri, por el Barça, también tuvo una buena ocasión de gol en el primer acto.
La segunda parte comenzó como la primera, con el Barça enfocando hacia la portería de Rui Silva, con Balde profundizando por la banda izquierda y Pedri rematando a la mínima oportunidad.
El gol de Raphinha
La insistencia barcelonista tuvo premio en el minuto 65, tras otra internada de Balde que culminó un oportunista Raphinha, libre de marca. El gol premió también la inteligencia de Frenkie de Jong, cada día más importante y menos cuestionado en el Barça.
El gol de Raphinha dejó muy tocado al Betis. Demasiado. El Barça, en cambio, encontró muchos más espacios y, a diferencia de los anteriores partidos, tuvo la calma y ambición suficientes para mataral rival con el segundo gol de Lewandowski. No especuló y encontró un premio muy goloso que le coloca en lo más alto de la Liga con ocho puntos de ventaja respecto al Real Madrid, que este jueves recibe al Valencia. El autogol final de Koundé le hizo sufrir hasta el final en Sevilla.