Salvo sorpresa, el Barça no se plantea hacer incorporaciones en la parcela defensiva de cara al próximo mercado de invierno. Xavi Hernández ya desveló una de sus conversaciones con Mateu Alemany, en la que se aseguró que no se harían muchos cambios en la plantilla.
"Le dije a Mateu que no tocáramos demasiado, que estoy muy contento con la plantilla, que hemos hecho familia. No sabemos, por el tema del fair-play, si podremos incorporar a nuevos futbolistas, pero estoy muy contento con lo que tengo", ha confesado Xavi en una entrevista realizada por el canal oficial del club.
Las opciones de Xavi para la defensa
Concretamente en la defensa hay dos comodines que hacen pensar que el club no hará fichajes para esa demarcación. En la plantilla actual hay tres laterales izquierdos, pero dos de ellos se pueden adaptar a otras posiciones.
Uno de ellos es Alejandro Balde, que puede jugar de lateral derecho. El joven futbolista ha jugado muchas veces en el carril diestro, ya que el conjunto azulgrana no acaba de confiar en Héctor Bellerín. Lo cierto es que Balde se ha desempañado muy bien en esa posición.
Xavi confía mucho en él, ya que además sabe que es un gran comodín para la defensa. El internacional español puede jugar en los dos laterales sin problema. Es una de las grandes apuestas de futuro del club.
El otro comodín es Marcos Alonso. El ex del Chelsea puede jugar en el perfil zurdo del eje de la defensa. En su anterior club demostró que puede desempañarse muy bien hasta en tres posiciones. De central, de lateral y de carrilero.
A diferencia de Balde, Alonso tiene un perfil más físico y más defensivo. Xavi lo tiene en sus planes, ya que es un futbolista que le aporta mucho en defensa. Para la parcela defensiva el técnico culé tiene jugadores de sobras.
Especial atención a otras demarcaciones
Además de estos dos comodines hay que tener en cuenta que Jordi Alba seguirá en el carril izquierdo. El de l'Hospitalet es el único que no puede jugar en otra posición que no sea esa. Todos irán rotando, con los cuatro centrales puros y los otros dos laterales derechos.
Esto quiere decir que si hay que hacer alguna incorporación en enero, se priorizará el centro del campo. Especialmente todo si se acaba marchando alguien: ya sea Busquets o Kessié. En este caso el Barça deberá buscar en el mercado algún centrocampista polivalente.