El FC Barcelona siempre trata de monitorear a las futuras promesas del fútbol mundial. En los últimos años, el mercado brasileño se ha vuelto a activar con mucha fuerza a partir de la irrupción de los nuevos talentos. Esa nueva camada se puede apreciar en la reciente convocatoria de la selección de cara al Mundial de Qatar. Aunque en el club azulgrana dejaron escapar a uno de esos cracks de la canarinha: Gabriel Martinelli.
Martinelli es actualmente una de las piezas más importantes del Arsenal de Arteta, el líder de la Premier League. Pero antes de llegar a este punto, el atacante pudo vestir la camiseta culé. Para ello hay que remontarse hasta el 2018, cuando el jugador estuvo en la Masía realizando pruebas para formar parte del filial; sin embargo, los técnicos por aquel entonces declinaron su fichaje y terminó recalando en el conjunto londinense.
Su experiencia en la Masía
Dos años después de esas pruebas, el brasileño reconoció en una entrevista con el diario Marca su experiencia en las instalaciones del Barça: "Estuve 15 días entrenando con el Barcelona, en noviembre. El Barcelona me invitó a entrenar con ellos en La Masia pero después no quiso hacer nada conmigo, no me dijeron nada...".
Pero aún así recuerda con cariño esos momentos, en donde llegó a formar una amistad con Ansu Fati: "Fueron unos días muy buenos. Ver cómo entrenaban, conocer la estructura de un club como el Barcelona, la ciudad... Fue un sueño realizado. Entrené con Ansu Fati y nos hicimos amigos. Me ayudó mucho en Barcelona. Ahora está en el primer equipo. Es un chico que merece todo lo bueno que le está pasando”.
El gran momento con el Arsenal
Ahora Martinelli es uno de los jugadores más importantes del Arsenal. Su evolución ha sido lentamente progresiva, hasta que finalmente se ha adueñado de ese puesto de la banda izquierda del ataque gunner. En la actual temporada tiene cinco goles y dos asistencias en 13 partidos disputados de la liga inglesa, siendo un perfil que aporta una enorme agresividad en los metros finales.
Su recompensa ha llegado también con la selección brasileña, en donde forma parte de la lista de convocados para la Copa del Mundo. Una serie de éxitos individuales que han impulsado su valor del mercado, el cual asciende hasta los 60 millones de euros.