De la esperanza a la depresión. De soñar con una temporada histórica a temer otro año horrible. El Barça está deprimido y Joan Laporta deberá gestionar una crisis que no entraba en sus planes tras vender activos del club que ponen en riesgo su futuro económico. Falta ver si el máximo dirigente tendrá paciencia con Xavi, a quien fichó hace un año para rescatar a un equipo hundido.
Xavi vive, posiblemente, los momentos más difíciles como entrenador del Barça. La situación del equipo es mucho menos dramática que hace un año, pero la decepción posiblemente es superior tras los fichajes de Christensen, Kessié, Lewansowski, Raphinha, Koundé, Bellerín y Marcos Alonso.
Las lesiones
El Barça había ganado siete de los ocho primeros partidos de Liga en los que acumulaba 20 goles a favor y solo uno en contra. El curso arrancó con un equipo hambriento, con un Koundé sensacional, un Pedri estelar, un Dembelé inspirado, un Raphinha sorprendente y un Lewandowski letal. Pero la alegría azulgrana comenzó a diluirse tras la última convocatoria de las selecciones nacionales.
La lesión de Koundé fue un duro golpe. La de Araujo, que estará tres meses de baja, mucho más. También cayeron Frenkie de Jong y Memphis. Y Bellerín en un entrenamiento. Y Christensen poco después. Con tantas bajas en defensa, el Barça se resquebrajó y Xavi no encontró un remedio efectivo. El doble enfrentamiento contra el Inter y la derrota con el Madrid han dejado muy tocado al técnico de Terrassa.
Fallan muchas piezas
A Xavi le han fallado muchas piezas. Algunas, vitales, como Sergio Busquets, quien cuestionó algunas decisiones tácticas del técnico. El error de Piqué contra el Inter también tuvo un efecto devastador para el equipo. Los otros dos capitanes, Alba y Sergi Roberto, tampoco están ya para grandes gestas. Y, paralelamente, Pedri parece apagarse, Dembelé vuelve a las andadas y Lewandowski ya no desenfunda como antes.
El Barça actual se parece cada vez más al de la pasada temporada. Es un equipo sin ideas y con poco fútbol. Los jugadores parecen desorientados y, en círculo íntimos, Laporta ya cuestiona a Xavi, de quien dijo que "todavía está verde" medio año antes de contratarlo.
"Las sensaciones son muy malas. Estamos en una dinámica muy negativa", admitió Xavi tras la derrota contra el Real Madrid en el Bernabéu. El técnico del Barça está tocado. Su receta, exitosa hace dos meses, no parece muy efectiva ahora, señal de que en el club fallan muchas cosas.