El Barça, líder en España, está con la soga al cuello en Europa. Sin margen de error tras su derrota ante el Inter. En la Champions, el equipo azulgrana revive año tras año sus peores pesadillas. Antes con Messi y ahora con Lewandowski. Si el delantero polaco no marca, el Barça se estrella y su supervivencia continental podría pasar por ganar los tres partidos que le quedan. Ante el Inter, el Bayern y el Viktoria Plzen. En San Siro, Xavi perdió su particular duelo con Inzaghi.
Xavi Hernández quería un Barça atrevido y con carácter en San Siro y apostó por una defensa con Sergi Roberto, Eric García, Christensen y Marcos Alonso, profundo por la izquierda. En el centro del campo jugaron Busquets, Pedri y Gavi, y en ataque alineó a Raphinha, Lewandowski y Dembelé. La elección de piezas fue lógica, pero no la tardanza en cambiar el signo de un partido que empezó mal y acabó peor.
Mucha presión
Inter y Barça, tras sus derrotas contra el Bayern, afrontaron el partido con mucha presión pero con un estado de ánimo más favorable al equipo azulgrana, líder otra vez en España. Su rival, en cambio, está en horas bajas, noveno de la Serie A, a ocho puntos del Nápoles y con su entrenador, Inzaghi, muy cuestionado.
Las bajas de Brozovic y de Lukaku también penalizaban a un Inter más intenso que exquisito. Inzagui sí pudo alinear a Lautaro Martínez, pero el delantero argentino no estaba en perfectas condiciones y tuvo como compañero a Correa, un atacante muy rápido.
Dembelé y Raphinha
El Barça tuvo el balón, pero apenas encontraba espacios contra un Inter que juntaba las líneas. Dembelé abría el campo por la derecha, mientras que Raphinha, más centrado, intentaba asociarse con Pedri y Gavi. La primera ocasión azulgrana llegó en un saque de esquina que Marcos Alonso cabeceó desviado.
Mediado el primer tiempo, Eric tocó el balón con las manos dentro del área, invalidadas por un fuera de juego previo, cuando mejor estaba el Inter y el Barça había levantado el pie del acelerador en la presión. La misma irregularidad cometió minutos después el equipo italiano en otra acción individual de Correa.
El gol de Çalhanoglu
El VAR salvó a un Barça al que intentaba agitar Dembelé, tan activo como desacertado en la toma de decisiones. Menos protagonismo tuvo Pedri, que exhibió destellos de su gran clase, pero tuvo muchos problemas para conectar con Lewandowski. Mucho más directo era el fútbol del Inter, que sacó petróleo en un remate desde fuera del área de Çalhanoglu en tiempo de prolongación.
El Barça, ofuscado y con poca chispa, encallaba en San Siro. El Inter, en cambio, se encontraba muy cómodo en defensa, desactivando perfectmente a Lewandowski. Las malas noticias continuaron con la lesión de Christensen, sustituido por Piqué, pero el grupo azulgrana pudo empatar en un remate de Dembelé que despejó Onana.
Balde y Ansu Fati
Xavi no movió ficha hasta el minuto 63 cuando Balde y Ansu Fati entraron por Marcos Alonso y Raphinha. Buscaba más profundidad el técnico de Terrassa y Pedri marcó poco después, pero el gol fue invalidado por unas manos del delantero bisauguineano que sí vio el VAR, pero no otras de Dumfries en el área interista.
El Inter, a partir de entonces, reculó todo lo que pudo ante un Barça con pocas luces. Perserveró hasta el final el conjunto azulgrana, que sigue con problemas en Europa. Dominador en España, se atasca en la Champions.