El FC Barcelona siempre está atento a la irrupción del nuevo talento en Europa. El club azulgrana ha tratado desde un par de años incorporar a las jóvenes promesas, con el objetivo de formar un proyecto a medio-largo plazo. Uno de esos nuevos cracks ha caído en la Liga, específicamente en la Real Sociedad, que ha sido inteligente para hacerse con los servicios del prometedor Mohamed-Ali Cho (18 años), considerado como el nuevo Dembelé.
Desde el Barça han anotado en su agenda al talentoso atacante francés, que empieza a ser uno de los jugadores más desequilibrantes del fútbol español, debido a su forma de atacar la espalda de la línea defensiva a partir de su agresividad y velocidad. Es un perfil que está beneficiando por completo a la Real Sociedad, a tal punto que se ha ganado rápidamente un espacio en el once titular.
La gran diferencia con Ousmane Dembelé es que es un jugador que ha acostumbrado a jugar en la punta del ataque, aunque también puede desenvolverse en cualquiera de las dos bandas. Pero sí hay que destacar comparten ciertas características físicas. Esa versatilidad supone un alivio para el equipo vasco, sobre todo por las diferentes opciones que da para su entrenador. Esas cualidades son del agrado del área de fútbol del FC Barcelona, que entiende que se trata de un futbolista con mucha proyección.
El Barça, sin prisas en el mercado
A pesar de ese interés, la entidad presidida por Joan Laporta no quiere apresurarse en la posibilidad de fichar a Mohamed-Ali Cho. Sigue siendo un futbolista muy joven, por lo que prefieren esperar a su evolución dentro de la Liga. Otro de los motivos por lo que el Barça está dispuesto a ser paciente con el galo es que ambas bandas del ataque la tienen bien cubiertas, con la presencia de jugadores como Ferran Torres, Ansu Fati, Raphinha o el propio Dembelé.
Sin embargo, es importante recordar que Dembelé finalizará su contrato en el verano del 2024. Y desde la directiva no quieren dejar nada al azar con respecto a ese espacio en la parcela ofensiva, ya sea por la posibilidad de renovar --otra vez-- el contrato del jugador o controlar ese futuro relevo, como es el caso de Mohamed-Ali Cho, que sigue generando mucho interés entre los grandes de Europa.