Andreas Christensen aterrizó en Barcelona tras pasar una década en el Chelsea. El central tenía otras ofertas encima de la mesa, pero jamás dudó cuando surgió la posibilidad de jugar en el FC Barcelona.
Ahora, el danés ha conseguido debutar como titular en Champions con la camiseta azulgrana. Su partido contra el Viktoria Plzen fue especial, ya que cualquier futbolista del mundo sueña con jugar la máxima competición europea en el Camp Nou.
Susto de Christensen
El partido del danés fue plácido. No tuvo mucho trabajo. Sin embargo, en un momento crucial de la primera parte se le complicó. Le pitaron penalti en contra en el minuto 25, y el árbitro le iba a mostrar la cartulina roja.
Christensen no paró de protestar, ya que era a él al que le habían hecho la falta. Por su cabeza seguro que pasó la acción con Haaland en el amistoso contra el Manchester City. Aquí, en la Champions, había VAR.
El VAR salva a Christensen
Christensen tuvo suerte y el VAR demostró que el culé había sido agredido por el futbolista del Viktoria Plzen, Mosquera. La acción pasó de ser penalti y expulsión para el central del Barça, a ser falta del atacante del Plzen, que además recibió cartulina amarilla.
Pese a este susto, el jugador del Barça seguro que se llevó un grato recuerdo del partido en el que su equipo fue capaz de doblegar con solvencia al cuadro checo.