Situación tensa entre el FC Barcelona y Gerard Piqué. El central catalán ha sido uno de los protagonistas del verano, aunque por los motivos equivocados. Sus problemas a nivel personal, sumado a las dudas que existen sobre su estado físico, han provocado que sea un caso difícil de gestionar para Xavi Hernández. A pesar de la intención inicial del jugador por hacer un esfuerzo de ayudar al club, lo cierto es que ha incumplido --por ahora-- su promesa, siendo un problema para el vestuario azulgrana.
La promesa incumplida de Piqué
Cabe recordar que el zaguero de 35 años había prometido pasar reducir su salario, debido a que la masa salarial del Barça todavía sigue disparada. Las negociaciones con la directiva de Joan Laporta se dieron hace ya varias semanas; sin embargo, no pudo llegarse a un acuerdo para cumplir con ese objetivo. Los días han pasado y la sensación es que va a tardar un poco más de tiempo para retomar nuevamente los contactos entre las dos partes.
Dicha situación incluso ha obligado al FC Barcelona a dejar en stand-by las rebajas salariales de los capitanes y enfocarse en otros jugadores que también deben reducir sus sueldos, como es el caso de Marc-André Ter Stegen y Frenkie de Jong. El portero alemán ha mostrado mucho compromiso con la entidad, por lo que su situación parece resolverse en poco tiempo; mientras que el centrocampista neerlandés tiene una oferta sobre la mesa, aunque todavía no hay una respuesta definitiva.
En todo caso, el club azulgrana tiene un importante problema con Gerard Piqué. Su promesa sigue en el aire y todavía se mantiene dentro del equipo, en una situación que puede ser peligrosa para el bienestar de la plantilla. Aunque Xavi ha tratado de bajar presión sobre esto en la rueda de prensa previa al duelo contra el Sevilla: “Los capitanes ayudarán jueguen o no jueguen. El compromiso de ellos con el club es intachable”.
El problemático caso de Alba
Por otra parte, no hay que pasar por debajo de la mesa el caso de Jordi Alba. El cuerpo técnico, al igual que con la situación de Piqué, tiene un problema con la figura del lateral izquierdo. En el tramo final del mercado de fichajes se llegó a informar de un acuerdo entre el Barça y el Inter de Milán por el futbolista en cuestión, aunque dio punto y final al rechazar contundentemente dicha posibilidad.
Ambos casos serán difíciles de gestionar para Xavi Hernández, que quiere construir un equipo con una mentalidad competitiva de cara a cumplir con los objetivos de la actual temporada. Los dos capitanes afrontan un curso complicado, en especial porque se encuentran bajo la intensa mirada del barcelonismo.