Gerard Piqué ha dejado de ser una pieza básica en el Barça. El defensa de la Bonanova asume con mucha discreción su suplencia y busca su reconciliación con Xavi tras la tensa reunión que ambos mantuvieron al acabar la pasada temporada.
El rendimiento de Piqué en el pasado ejercicio, con muchas molestias físicas, fue de más a menos. En cambio, el futbolista estuvo envuelto en varias polémicas. Entre ellas, su relación con Luis Rubiales, presidente de la Federación Española de Fútbol. Los vídeos que se filtraron sobre sus consejos respecto a la Supercopa generaron muchos debates acalorados. Su separación de Shakira también fue una noticia sonada.
La notoriedad de Piqué
Molesto con la notoriedad de Piqué, Xavi le comentó que ya no contaba con él. O, en el mejor de los casos, que sería suplente en la actual temporada.
Xavi le explicó que estaba preocupado por su estado físico y, sobre todo, le recriminó algunos capítulos de su vida privada por el impacto que tenían en el vestuario. También le pidió que se rebajara el sueldo y que se centrara en el fútbol.
Perfil muy bajo
Piqué asumió el reto. Se comprometió a revisar su salario, le garantizó que recuperaría su mejor forma y le prometió que sería discreto.
Y el defensa del Barça está cumpliendo sus promesas. Al menos, en la pretemporada. Piqué, suplente habitual, no se ha quedado y ha optado por un perfil muy plano porque busca su reconciliación con Xavi.