El delantero del FC Barcelona, Martin Braithwaite, tiene imposible su continuidad en el FC Barcelona. El entrenador del club azulgrana, Xavi Hernández, ya comunicó al danés su exclusión de la gira norteamericana como descarte. A la espera de la cesión de Ez Abde, Braithwaite cierra la rotación de la delantera en el noveno y último lugar. Sin embargo, con todo el panorama en contra, el danés se resiste a abandonar el club.
En Can Barça buscan insistentemente una salida a Braithwaite, junto a otros futbolistas descartados por Xavi como Samuel Umtiti y Neto. En el caso del danés, la rescisión de contrato aparece como la solución ideal. No obstante, el diario Sport informa sobre la intransigencia del ariete en sus demandas: Braithwaite exige cobrar íntegramente los dos años de contrato restantes. Ante esta negativa a facilitar su salida del club, la directiva de Joan Laporta se plantearía rescindir unilateralmente al danés, siempre según dicha información.
¡Pide ocho millones para salir!
En este supuesto, el club tendría que abonar la integridad de los dos años de ficha restantes a Braithwaite. En caso contrario, el jugador podría permanecer en el Barça hasta junio de 2024, aunque fuese apartado del primer equipo. El danés cierra el tercer escalafón salarial del club, situado entre los cuatro y los ocho millones de euros. Según ha podido saber Culemanía, los emolumentos del ariete rondan los cuatro millones brutos anuales. Es decir, el Barça le tendría que pagar ocho millones, que es la cifra que se desprende de los dos años que le quedan más los impuestos derivados.
Ousmane Dembele y Martin Braithwaite celebran un gol con el Barça / EFE
Ousmane Dembele y Martin Braithwaite celebran un gol con el Barça / EFE
Se trata de un escenario poco probable ya que el Barça, en caso de pagarle los dos años íntegros, no tendría por qué darle la carta de libertad. Lo normal en estos casos es que el club indemnice al jugador con una parte del salario firmado por contrato a cambio de liberarlo. De esta forma, Braithwaite podría buscarse un nuevo equipo donde jugar y que le compense con su nuevo salario lo que dejará de ganar en Barcelona. Si no acepta, sabe que quedarse es sinónimo de calentar la grada del Camp Nou. Eso sí, aseguraría su calidad de vida para dedicarse a otras cosas: cobraría los ocho millones por acudir cada día a entrenar y poco más.
Un fichaje de urgencia
Braithwaite aterrizó en el Barça como refuerzo de urgencia ante la lesión de Luis Suárez en el menisco en febrero de 2020. El club azulgrana tuvo que abonar la totalidad de la cláusula, cifrada en 18 millones de euros.
Pierre-Emerick Aubameyang, junto a Braithwaite, en un entrenamiento de la pretemporada del Barça / FCB
Pierre-Emerick Aubameyang, junto a Braithwaite, en un entrenamiento de la pretemporada del Barça / FCB
El internacional con Dinamarca había liderado al Leganés en ataque junto a Youssef En-Nesyri hasta el ecuador de la Liga 2019-20. Los seis goles y dos asistencias de Braithwaite mantenían a los pepineros en la lucha por la salvación. La imposibilidad de fichar un recambio para el danés fuera de mercado mermó gravemente las aspiraciones del cuadro madrileño, que bajó a Segunda división al término de la temporada.
Sin embargo, en un Barça plagado de estrellas, el rendimiento de Braithwaite se apagó. Los goles del danés durante las dos temporadas y media en el Camp Nou han aparecido con cuentagotas. En total, 10 tantos con la elástica azulgrana en 55 partidos. Cada gol del ariete de 31 años ha costado 1,8 millones de euros. A pesar del esfuerzo económico del club en el momento de su compra, Braithwaite se mantiene estoico en sus desorbitadas exigencias.