Primero llegó Franck Kessie. Luego, Andreas Christensen. Después se firmó el nuevo contrato a Ousmane Dembelé. Al día siguiente, el Barça presentó a Raphinha para hacerle la competencia. Y, ya desde Estados Unidos, el club anunció el fichaje de Robert Lewandowski. Todos ellos eran esperados. Algunos más que otros, pero ninguno sorprendió en exceso porque, incluso en el caso de Lewandowski, desde Culemanía veníamos hablando de que su fichaje estaba encarrilado desde marzo. El que nadie se esperaba era el fichaje de Jules Koundé. Pero ya es oficial.
El Barça pagará 50 millones de euros fijos más otros 10 millones en variables. Una cantidad sensiblemente inferior a los 55+10 millones que ofrecía el Chelsea. El Sevilla se ha decantado por el club culé por dos motivos: primero, porque esa era la voluntad del jugador tras haber hablado por teléfono con Xavi Hernández. En segundo lugar, porque la entidad azulgrana ofrecía unas condiciones de pago que eran más del agrado del club que preside José Castro. Cómo ya explicó este medio, la entidad azulgrana colabora con la financiera SportsFi para avanzar el dinero al club vendedor y que el Barça lo devuelva en cómodos plazos.
El defensa central del Sevilla ha llegado a Barcelona este mismo jueves en un vuelo ordinario procedente de la capital andaluza. Un seguidor lo ha captado en el mismo avión y, posteriormente, algunos medios han cazado su salida del aeropuerto de El Prat. Llega para pasar revisión médica --hay que recordar que tiene una lesión de pubis, similar a la que arrastraba Piqué-- y el club ya ha hecho oficial un principio de acuerdo con el club hispalense. La presentación está prevista para el próximo lunes.
El origen del fichaje
Como decíamos, se trata de una incorporación que nadie esperaba hace meses. De hecho, Culemanía fue el primer medio en hablar seriamente de esa posibilidad el pasado 1 de abril al desvelar que el Barça conocía perfectamente el salario del jugador en el Sevilla. Tratándose de una suma de dinero muy baja --700.000 euros netos, sobre 1,3 millones brutos--, la entidad azulgrana lo consideraba una posibilidad muy apetecible, aunque se daba por sentada la dificultad para sacarlo del club andaluz sin pagar un traspaso elevado.
Posteriormente fue el periodista de As Javi Miguel, también colaborador de Culemanía, quien se aventuró a decir en mayo que el Barça iba a ir con todo a por el fichaje de Koundé o, en su defecto, de Koulibaly. El citado periodista informó de la buena relación de Xavi con Fernando Navarro, miembro de la dirección deportiva del Sevilla, y explicó que el club azulgrana se planteaba meter a Sergiño Dest en la operación, dado el interés que le suscitaba a Monchi. El problema, obviamente, iba a ser convencer a Dest de dar un paso atrás para firmar por el Sevilla y, al mismo tiempo, que el club andaluz pudiese asumir un salario del Barça.
Cinco fichajes top + Dembelé (y quedan dos más)
A pesar de estas informaciones, la posibilidad de que Koundé recalase en el Barça fue perdiendo fuelle porque la pésima situación económica del club hacía difícil pensar en la posibilidad de cerrar ese fichaje cuando ya se conocía un refuerzo para la defensa, el de Christensen. Las prioridades pasaban por reforzar la línea de ataque, donde Lewandowski era el gran objetivo, pero también los extremos Dembelé y Raphinha. Ellos fueron la otra gran sorpresa de Laporta en este mercado de fichajes. Mientras se daba por sentado que únicamente vendría uno de los dos, el presidente y Mateu Alemany consiguieron a ambos para satisfacer a Xavi.
El técnico azulgrana, sin embargo, todavía no está del todo satisfecho y espera que le traigan más jugadores. Aunque los que podrían venir están varios peldaños por debajo de los que han venido: César Azpilicueta y Marcos Alonso. Xavi los quería, pero especialmente hizo hincapié en la necesidad de traerlos antes de conocer el fichaje de Koundé. Ahora, con el central francés, el equipo gana en variantes porque Koundé también puede jugar de central derecho o puede liderar, con Araujo y Christensen, una línea de tres centrales para el 3-4-3 con el que sorprenderá el entrenador en algunos partidos. Mucho menos probable es la llegada de Bernardo Silva.