Ya no hay vuelta atrás. Xavi Hernández no podrá estar presente para dirigir al FC Barcelona en el primer partido de la gira de pretemporada por Estados Unidos. El técnico culé se ausentará del amistoso frente al Inter de Miami por culpa de un asunto burocrático que, por ahora, le impide volar hacia tierras norteamericanas.
A día de hoy, el egarense sigue esperando en Barcelona para obtener la luz verde a su visado y, de esta forma, poder emprender el rumbo a los Estados Unidos. El entrenador del Barça se quedó en tierra el sábado pasado sin poder acompañar al equipo en el viaje a Miami, al negarle la salida los responsables del control de pasaportes en el aeropuerto de El Prat por haber estado tres veces en Irán, un país enemigo para EEUU. Los viajes de Xavi a Irán se produjeron mientras estaba vinculado al Al Sadd de Qatar, y se debieron a motivos estrictamente laborales y deportivos, en ningún caso turísticos ni ociosos.
No en Miami; sí en Las Vegas
La explicación, en cualquier caso, de momento no convence a la burocracia norteamericana. En el Barça tenían la esperanza de que Xavi pudiese estar presente en el banquillo durante esta próxima madrugada (02.00 hora española) en Miami. Pero las horas han ido pasando y, en estos momentos, al entrenador ya no le da tiempo de llegar.
Será por tanto su hermano Óscar Hernández, que sigue al frente de los entrenamientos en Florida y acogió en las últimas horas a Robert Lewandowski, quien se siente en el banquillo comunicándose a distancia con Xavi. El siguiente compromiso amistoso del Barça en la gira norteamericana tendrá lugar en Las Vegas contra el Real Madrid, durante la madrugada del sábado 23 al domingo 24 (05.00 hora española / La 1 y TV3), y se espera que para entonces Xavi ya pueda estar en el banquillo del Allegiant Stadium.
Luz verde en cuestión de horas
El tiempo máximo de espera para recibir la autorización tras la solicitud efectuada es de 72 horas, por lo que en el peor de los casos, Xavi espera disponer de todos los permisos en regla a lo largo de este martes. De esta forma, podría viajar a Miami en un vuelo directo durante la mañana del miércoles, justo después del partido del FC Barcelona contra el Inter Miami.
Eso le permitiría unirse a la expedición culé para viajar el jueves a Las Vegas, segunda parada de la expedición, y entrenar con normalidad al equipo antes del clásico de pretemporada contra el Real Madrid. Mientras termina de solucionarse el problema, en el Barça deberán buscar explicaciones y, también, algún responsable.
Y es que no es habitual que, en un club tan grande como el Barcelona, no se tengan en cuenta este tipo de situaciones desde el primer día. También sorprende, en este sentido, la escasa ayuda que la expedición culé ha recibido por parte de la organización de la gira americana, a fin de agilizar los trámites y ayudar a resolver el asunto. Al final, todo quedará como una anécdota. Pero de ella, igual que de todo en la vida, hará falta aprender.