Más allá de que no dejen de sonar nombres de fichajes para el ataque como Robert Lewandowski o Raphinha, las estadísticas --y sensaciones-- dicen que donde más debe reforzarse el FC Barcelona este verano es en el aspecto defensivo. Marcos Alonso y César Azpilicueta son los objetivos prioritarios para apuntalar el lateral izquierdo y el derecho, mientras que en el eje de la defensa Jules Koundé aparece como el central deseado por Xavi Hernández para potenciar ostensiblemente el nivel en la zona más endeble del equipo.
También gusta y mucho a la junta directiva de Laporta, aunque el Sevilla pide 65 millones de euros que el FC Barcelona, hoy por hoy, no puede ni quiere pagar. De ahí que el conjunto culé haya buscado alternativas en las últimas semanas, y una de las que más se valoraba es la de Kalidou Koulibaly.
Una ganga para el Barça
El central senegalés acaba contrato en junio de 2023, todavía no ha firmado la renovación con el Nápoles y parecía convencido, días atrás, de hacer las maletas para recalar en otro club donde fuese capaz de conquistar títulos de gran calado. Sus últimas declaraciones públicas, sin embargo, ponen en duda su salida del club partenopeo y dejan entrever que seguirá vistiendo de celeste la próxima campaña 2022-23, después de que haya habido acercamientos entre su entorno y la directiva napolitana para extender su contrato.
"No puedo estar totalmente feliz porque queríamos luchar por el campeonato, queríamos estar en la pelea, y no logramos los puntos en la recta final", ha manifestado en una entrevista concedida a BBC Sports, en la que ha hablado sobre el proyecto del Nápoles para el próximo curso, además de lo ocurrido esta última campaña.
Koulibaly, enamorado de Nápoles
El central africano se muestra convencido de que su actual equipo luchará por el Scudetto la próxima temporada, dejando entrever que él formará parte de ese proyecto ganador. Su vínculo con la ciudad del sur de Italia va más allá del fútbol, tras más de una década en el equipo. "Tengo una relación muy especial con las personas de Nápoles. Me acogieron genial, tanto a mí como a mi familia y amigos", explica.
"Mucha gente me felicitó cuando ganamos la Copa África", recuerda, mostrándose optimista con la transformación de plantilla que le espera al Nápoles en los próximos meses. "Perderemos algunos jugadores, habrá cambios la próxima temporada. Pero sé que el Nápoles hará de todo para estar en la lucha por el título", señala el senegalés.
Por las palabras de Koulibaly, en este sentido, se deduce que tiene pensado continuar a las órdenes de Luciano Spalletti un año más, como mínimo, y que rechazará el interés que despierta en varios grandes clubes de Europa desde hace meses, entre ellos el FC Barcelona. Los culés, de esta forma, pierden a otro objetivo para la defensa.